Ya se sabe qué sanción conllevará subir un patinete al transporte público

28 de enero de 2023 a las 11:35h

 La prohibición temporal de seis meses para viajar con el patinete eléctrico en el transporte público entrará en vigor este miércoles 1 de febrero tras el incendio de uno de estos vehículos de movilidad personal en un vagón de FGC. El director general de la ATM, Pere Torres, justifica la medida para "garantizar al máximo la seguridad de los usuarios" y porque este período supone un "tiempo razonable" para estudiar cómo reducir el riesgo a cero. Durante este medio año, subir el patinete al transporte público puede conllevar sanciones de 200 euros. En cambio, los usuarios y las empresas de movilidad lamentan esta prohibición. "Es una decisión demasiado contundente", critica la directora de la Asociación de Empresas de Movilidad, Entorno Sostenible y Smart (AEMES), Neus Olea.

En declaraciones a la ACN, el director general de la Autoridad del Transporte Metropolitano, Pere Torres, explica que durante estos seis meses se celebrarán reuniones con operadores, fabricantes y usuarios para encontrar una solución para minimizar el riesgo de incendio de las baterías de estos vehículos.

"No dejaremos fuera de la participación y reflexión a nadie que pueda aportar algún aspecto o elemento que pueda ser de interés", se compromete Torres, que asegura que la prohibición no debería alargarse más allá de este período. "Si fuera necesaria una prórroga, la haríamos, pero el propósito es que no se convierta en permanente", apunta. Mientras tanto, la ATM irá habilitando progresivamente espacios para estacionar los patinetes en las estaciones.

El objetivo final, reitera, es garantizar la seguridad. "Preservar la seguridad de las otras personas merece a veces actuaciones contundentes", argumenta el director general de la ATM, que recuerda que el incendio de un patinete en un vagón de FGC el noviembre pasado en Sant Boi de Llobregat tuvo lugar en una estación al aire libre, con poca gente y con las puertas del tren abiertas. "Situemos el mismo incidente en el mismo tren, lleno y en un túnel. Probablemente no estaríamos hablando de desperfectos y de dos heridos de poca consideración", añade.

Los usuarios ven el accidente de Sant Boi de Llobregat como un caso puntual

Desde la estación de Ferrocarriles de la Generalitat en Sant Cugat del Vallès, Cristina Leonelli explica que hace cinco años que se desplaza con patinete al trabajo y que a partir del miércoles tendrá que dejar de hacerlo y ahora tendrá que destinarle más tiempo. "No estoy del todo a favor de la decisión porque la explosión de patinetes pasa de vez en cuando como con móviles y con patinetes trucados", señala.

Por su parte, Israel Carmona comenta a la ACN que usa con VMP para ir a Barcelona, donde reside su madre. "Esto es un "engañabobos", porque tú llevas un móvil o un portátil con batería, y lo mismo que pasó con el patinete podría pasar con un móvil o un ordenador", opina.

Otro viajero de la compañía, Rómulo Orlando, comenta que pasará a utilizar una bicicleta. En la misma línea, atribuye el incendio a partir del cual se ha prohibido temporalmente el uso de los patinetes a un posible trucaje del vehículo. "No quiere decir que pase lo mismo con todos", lamenta. "Sería necesario considerar hacer revisiones a patinetes, como la ITV para los coches, para asegurarse de que está en buenas condiciones", añade.

De la misma opinión es la directora de la Asociación de Empresas de Movilidad, Entorno Sostenible y Smart (AEMES), Neus Olea, que propone que los patinetes tengan que pasar una inspección técnica, junto con medidas "más smart", como por ejemplo habilitar un QR que certifique que se han superado estos controles.

La directora de la AEMES pide a la ATM que se replantee esta medida y opte por otras más concretas para minimizar el riesgo de otro incendio en el interior del transporte público. "Es una decisión que se ha tomado muy rápido, es demasiado contundente", se queja Olea, que sospecha que el incendio en un convoy de noviembre de FGC en Sant Boi de Llobregat fue causado porque el patinete se estaba cargando. "Es muy extraño que a un patinete le pase esto si no está cargando", reitera la directora de la asociación en declaraciones a la ACN. En cambio, la ATM desmiente que en aquel momento estuviera conectado a la corriente.

Olea, además, propone apostar por los patinetes compartidos, una opción pero que en la ciudad de Barcelona no es posible porque el concurso está aparcado desde hace muchos meses. Para la directiva de la AEMES, serviría para tener un mayor control sobre estos vehículos de movilidad personal, estarían homologados y con la velocidad limitada, uno de los aspectos que más preocupan a los peatones, sostiene.

A pesar de la prohibición a subir los patinetes eléctricos en el transporte público de la ATM, las empresas del sector no creen que se traduzca en un descenso de las ventas. "Si fuera a largo plazo sí", puntualiza Olea, que critica que la prohibición va en contra de los llamamientos a utilizar más el transporte público.

Por otro lado, en Tarragona, la Autoridad Territorial de Movilidad (ATM) también ha optado por prohibir durante medio año el acceso de los patinetes eléctricos y otros vehículos eléctricos de movilidad personal a los autobuses del transporte público. En la misma línea que la ATM de Barcelona, estos meses se destinarán a estudiar las condiciones de uso y acceso al transporte público.