La Fiscalía pide 15 años de prisión para un joven francés por, presuntamente, violar a una chica en un aparthotel de L'Hospitalet de Llobregat en agosto de 2018, después de salir de fiesta por el Puerto Olímpico de Barcelona y mientras otro joven, menor de edad, también violaba a la amiga de la víctima en una habitación contigua.
En el juicio, que se ha desarrollado este martes en la sección séptima de la Audiencia de Barcelona y que ya ha quedado visto para sentencia, el ministerio público ha reclamado la pena máxima prevista para delitos de agresión sexual, además de 60.000 euros, como mínimo, en conceptos de multas e indemnizaciones.
Según describe el ministerio público en su escrito provisional, el procesado y dos amigos suyos, también de nacionalidad francesa, salieron de fiesta por la zona de ocio nocturno del Puerto Olímpico de Barcelona la noche del 1 de agosto de 2018. En el puerto, detalla la Fiscalía, conocieron a dos chicas, y los cinco acabaron en el aparthotel que los jóvenes franceses habían alquilado en L'Hospitalet. Una vez dentro, los chicos propusieron e insistieron en tener relaciones sexuales, llegando incluso a ofrecer dinero a cambio, pero ellas se negaron continuamente, según Metrópoli.
Hacia las 7.30 horas, dice el ministerio público, el menor de los tres amigos se "aprovechó de que las chicas estaban en una situación de vulnerabilidad por estar en un lugar que desconocían, y violó a una en una habitación del aparthotel". Mientras tanto, en el salón, el procesado y el tercer amigo comenzaron a desnudar a la víctima del caso de este martes, siempre con la negativa a tener relaciones sexuales, y, al final, la forzaron a entrar en otra habitación, donde el acusado la violó con la ayuda de su amigo, que sujetaba a la chica.
El ministerio público remarca que las dos amigas en ningún momento consintieron las relaciones que pretendían tener los chicos, y que al final las violaron usando la fuerza en contra de su voluntad. Después de las agresiones, termina la Fiscalía, las jóvenes salieron de las habitaciones y comenzaron a increpar a los tres chicos por lo que habían hecho, iniciando una pelea donde se lanzaron objetos mutuamente, como una botella de vidrio y el teléfono del hotel. Las víctimas llamaron al 112 e intentaron impedir que los acusados huyeran del lugar, pero los tres chicos consiguieron salir, llegar al coche y huir.
Por su parte, el acusado ha negado en el juicio haber violado a la víctima, como también lo ha hecho el segundo amigo mayor, que ha declarado como testigo; el tercero era menor en el momento de los hechos y no ha sido procesado ni citado en este procedimiento. Ambos amigos han asegurado que las dos chicas tuvieron sexo consentido con ellos y que, después de tener relaciones sexuales, les reclamaron dinero.
Ellos, según la versión del acusado, se negaron a dar el dinero a las chicas y es en ese momento, ha apuntado el procesado, cuando comenzaron a gritar, a lanzar objetos y a amenazarlos con llevarlos a la policía. Huyeron esa misma mañana a su ciudad, Clermont-Ferrand (Francia), ha dicho el acusado, porque una aseguró que tenía un tío mosso d'esquadra y tuvieron miedo de verse inmiscuidos en una causa judicial en el extranjero, donde estaban como turistas.
La víctima ha desmentido la versión que han dado el acusado y su amigo, y ha dicho que lo único que hicieron por voluntad propia fue aceptar la invitación de los chicos de ir a su apartamento a beber unas copas, con la pretensión de continuar la fiesta en otro lugar. Ella ha remarcado que en todo momento se negó a tener sexo y que, aunque empujaba a los chicos para intentar que no la violaran, entre ambos eran más fuertes que ella.
