La Audiencia ha condenado a cinco años de prisión a un hombre por violar a una excompañera de trabajo en un piso de Palma. El procesado deberá indemnizar a la víctima con 3.000 euros por el daño moral. Los hechos ocurrieron el 9 de junio de 2020, según la sentencia. El acusado salió a cenar con su pareja y la perjudicada. Más tarde se reunieron con otros amigos y estuvieron tomando copas por el Paseo Marítimo hasta que decidieron acudir al domicilio que el juzgado compartía con su novia. Una vez allí, continuaron bebiendo y escuchando música. La denunciante se encontraba inconsciente y se quedó a dormir en la habitación de invitados. El hombre la metió en la cama vestida y la tapó. Un amigo de la pareja se fue a su casa y el acusado y su novia se fueron a dormir. El procesado, sabiendo que no era posible que la mujer se despertara por la gran cantidad de bebida ingerida, aprovechó para violarla. La fiscal Lídia de la Vall preguntó al hombre por el ADN que se encontró en la ropa interior de la víctima. Dijo que tuvo relaciones antes de esa noche a escondidas de su pareja. Los jueces no le creen. «Ha querido hacer ver al tribunal que la mujer ha guardado una ropa interior con restos de semen de una relación que había pasado una semana antes y que ha actuado movida por celos o por venganza».