Un detenido por los Mossos d'Esquadra en Salt (Gironès) grabó el pasado 14 de abril un vídeo con su teléfono móvil mientras estaba en el vehículo policial y con las esposas puestas. Según ha avanzado elcaso.cat y han confirmado los Mossos d'Esquadra a la ACN, se trata de un chico joven, al que la policía califica de "reincidente" y que subió la grabación a la red social TikTok.
Los Mossos reconocen que el protocolo policial establece que se deben requisar los efectos personales del detenido antes de subirlo al coche, pero añaden que en algunas situaciones, si las circunstancias lo obligan, se puede hacer el registro después de trasladar al detenido a la comisaría. Los Mossos d'Esquadra están realizando una investigación interna para aclarar los hechos.
Este chico fue trasladado a la comisaría en el vehículo policial y allí él mismo se grabó un video con el móvil que subió a la red social Tik Tok. De hecho, en la grabación se le ve hablando con los Mossos, recriminándoles la detención, y pasando después a un registro provocador con el que pregunta a los agentes: "¿Qué podemos decir para mi gente de Tik Tok?"
Según la policía, el chico era un delincuente "reincidente".
Los Mossos d'Esquadra reconocen que este no es el protocolo habitual. El reglamento policial establece que cuando se hace una detención se requisen los efectos personales antes de hacer subir al detenido al coche. Pero añaden que en ocasiones, si las circunstancias lo obligan, se puede hacer el registro después del desplazamiento.
Las fuentes policiales, sin embargo, no confirman que este fuera el caso de la detención del jueves pasado en Salt. De hecho, los mandos de la comisaría están llevando a cabo una investigación para aclarar los hechos.
También se ve en el vídeo que el joven lleva las esposas por delante y el protocolo dice que se deben poner por detrás de la espalda.
El vídeo dura al menos un minuto y medio y se escucha al detenido lamentarse de la detención al mismo tiempo que pide a los agentes que lo lleven ante el juez de guardia antes de que este acabe su turno.
Y acaba mirando a la cámara y diciendo: "Pues nada, gente, aquí, un día en el calabozo".
