Este martes por la tarde, el Departamento de Salud de la Generalitat de Catalunya decretará la obligatoriedad del uso de la mascarilla en la entrada y durante la estancia en centros de salud, hospitales, residencias de ancianos y otros centros de vulnerabilidad. La medida entra en vigor de manera inmediata, y se ha tomado a raíz del aumento de contagios de gripe que está generando una situación de presión en los servicios de urgencias y hospitales de todo el territorio.
La consellera portavoz, Sílvia Paneque, ha avanzado esta medida en la rueda de prensa posterior al Consell Executiu, destacando que el objetivo es contener la expansión del virus durante esta temporada de Navidad, cuando los brotes de gripe se hacen más evidentes. Paneque subrayó que el uso de la mascarilla, combinado con la vacunación, es una medida clave para minimizar los contagios y evitar que las personas vulnerables se vean afectadas por la enfermedad.
La gripe, que este año ha llegado un mes antes de lo habitual, está teniendo un impacto muy grande en los servicios de urgencias. En muchos hospitales, los pacientes se ven obligados a esperar en los pasillos, con más de 24 horas de espera para ser ingresados, y se han suspendido intervenciones quirúrgicas no urgentes. Los centros sanitarios se encuentran saturados, con un número de casos que no para de crecer
Esta situación ha provocado que Cataluña haya entrado en un nivel epidémico moderado, con un aumento de los casos, especialmente entre niños y adolescentes. En las últimas semanas, se ha registrado una tasa de 164 casos por cada 100.000 habitantes, una cifra que sigue aumentando. Los expertos prevén que el pico de la gripe llegará durante el puente de diciembre, lo que supone una nueva aceleración en la propagación del virus respecto a otras temporadas
Con esta nueva medida, se quiere evitar una situación crítica en las unidades de cuidados intensivos y garantizar que los servicios sanitarios puedan hacer frente al incremento de casos que se espera durante las próximas semanas.