Una mujer fue detenida el pasado miércoles por tratar de ahogar a una perra de nueve años. La propietaria del perro es una trabajadora de la hostelería, por lo tanto, no puede estar pendiente por trabajar durante largas jornadas. Un amigo de ella se prestó a cuidar de su perra, porque él estaba de baja laboral y, en consecuencia, tenía tiempo para vigilarla. El chico no tenía ningún problema con la perra de su amiga. Sacaba al animal a paseo y le daba de comer. El problema fue cuando un día él estaba en rehabilitación y su pareja tuvo que pasear a la perra. La pareja del amigo de la propietaria, desde el primer momento, según indican, mostraba signos de violencia hacia el animal. Continuando paseándola, se la llevó a la playa de las Illetes. Allí, metió a la perra en el agua y trató de ahogarla. Por suerte, otros bañistas alertaron a la Policía Local de Calvià. La mujer mostraba claros signos de ir alcoholizada.