Una madre no se quiere vacunar y muere sin poder conocer a su hija recién nacida

09 de noviembre de 2021 a las 08:15h

Saiqa Parveen, de 37 años, nunca conoció a su hija menor, que nació por cesárea de emergencia mientras estaba en vigilancia intensiva. Le habían ofrecido una vacuna para protegerse contra Covid-19, pero quería esperar hasta que naciera su bebé antes de recibirla.

Su hermano Qayoum Mughal, de 54 años, ahora ha instado a otros a no cometer el mismo error que Saiqa: "Por el amor de Dios, vacúnense. La familia está completamente destrozada. Sus hijas preguntan: ¿Cuándo volverá mamá?", asegura.

La falta de información inicial sobre la seguridad de la vacuna en mujeres embarazadas ha provocado que muchas no quieran vacunarse, ya que, en principio, no fueron incluidas en los ensayos.

Ahora, la evidencia muestra que Covid-19 es peligroso para las embarazadas y, por lo tanto, deben protegerse con la vacuna. Entre el 1 de julio y el 30 de septiembre, casi una quinta parte (17%) de los enfermos de Covid que requirieron un tratamiento intensivo a través de un respirador fueron mujeres embarazadas no vacunadas.

Anoche, los familiares publicaron una foto de Saiqa luchando por su vida en el hospital, junto con una imagen del bebé Dua Maryam, a quien nunca pudo tener en sus brazos. Saiqa, de Birmingham (Reino Unido), desarrolló problemas respiratorios después de dar positivo por Covid en el tercer trimestre de su embarazo y fue trasladada en ambulancia al Hospital Heartlands de la ciudad.

Fue dada de alta seis días después, y a los pocos días volvió a necesitar ser ingresada porque no remitieron los problemas respiratorios. "Ella estaba con oxígeno y el 25 de septiembre, llamó a mi esposa a las 11 p. m. y dijo que había firmado documentos que decían que si su condición empeoraba, los médicos podrían operarla para sacar al bebé", explica su hermano. "Esa fue la última conversación con cualquiera de nosotros. Nunca vio a su hija", lamenta.

Para entonces, Saiqa estaba luchando contra la sepsis y tenía un agujero en los pulmones, neumonía y otras infecciones. Murió el 1 de noviembre, dejando atrás a su esposo Majid Ghafur, a la recién nacida Dua y a sus otras hijas Noor (12 años), Imaan (11 años), Hibbah (8 años) y Ayesha (6 años).

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