Caminar por tierras transparentes de cristal supone todo un reto para aquellas personas que tienen vértigo. La sensación de cosquilleo interior al mirarte los pies y ver que estás 'flotando' normalmente contrasta con la seguridad de unas estructuras construidas a conciencia para ser indestructibles.
En China ya hace años que se ha puesto de moda construir puentes de cristal a grandes alturas. Estas construcciones son toda una atracción turística y una de las más conocidas la encontramos en la montaña de Piyan, en la ciudad china de Longjing.
Allí, este fin de semana se vivió una terrorífica escena que demostró que por muy robustos que puedan ser estos puentes, también son vulnerables a los fenómenos naturales imprevistos.
Ráfagas de viento huracanado de 150 kilómetros por hora aterrizaron en la zona turística y arrancaron los paneles de cristal de sus puntas. En aquel momento, había un hombre cruzando el puente que vio como su paso quedaba interrumpido y no tuvo más opción que aferrarse al pasamanos que tenía más cerca a la espera de ayuda. Al cabo de pocos minutos circulaba en redes sociales una imagen en la cual se podía ver a este hombre agarrado a uno de los laterales estando suspendido a 100 metros de altura.