Dos años después del brutal asesinato, en medio de la calle y a plena luz del día, que el 1 de junio de 2019 conmocionó a Montcada y Reixac, el acusado por el crimen se enfrenta a una condena de 22 años y medio de prisión tal y como ya ha solicitado la Fiscalía.
Los hechos ocurrieron por la mañana de ese día fatídico. El presunto homicida, un hombre con antecedentes, entró hacia las 7:00h en un bar cercano al domicilio de su exnovia, al lado de la estación de Rodalies de Santa Maria. Allí esperó a que ella saliera a la calle. Lo hizo horas más tarde, acompañada de la nueva pareja.
En ese momento, el acusado habría salido del local para lanzarse sobre ellos. Llevaba un cuchillo de grandes dimensiones, escondido en una mochila, con el cual habría querido atacarlos a ambos. Pero el novio de la mujer se colocó frente a él para defenderla y su agresor se enfrentó a él.
Después de hacerlo caer al suelo, el presunto asesino se sentó sobre el hombre y lo apuñaló reiteradamente. La mayoría de las heridas se las infligió en la cabeza, aunque también lo apuñaló en otras partes del cuerpo. En total, 118 heridas. Después de la agresión, le cortó los genitales con el cuchillo. Malherido, no pudo superar la gravedad de las heridas y murió poco después.