La Audiencia de Girona ha juzgado este martes a un camarero para quien la fiscal pide 8 años de prisión por agredir sexualmente a una compañera de trabajo en Palamós (Baix Empordà) la noche del 18 de noviembre de 2018. Según el escrito de acusación, el hombre le hizo beber unos chupitos y, cuando la chica se empezó a encontrar mal, la acorraló contra una nevera, le hizo tocamientos por dentro de la ropa y le introdujo los dedos en la vagina. La víctima ha declarado a puerta cerrada. El acusado niega los hechos. En el juicio ha afirmado que "nunca" ha agredido a ninguna mujer y dice que no entiende por qué la víctima lo denunció. Apunta que quizás se sintió mal porque ella había intentado darle un beso pero él la rechazó. La defensa quiere la absolución.