Tres personas, una de ellas menor de edad, han sido detenidas por su presunta implicación en la "brutal paliza" a un joven de 21 años en Elche (Alicante), a quien cortaron la cara con un arma blanca y le apuñalaron los glúteos con un punzón, después un perro pitbull le mordió esta parte del cuerpo, propinándole además golpes y patadas cuando se encontraba indefenso en el suelo.
Sin embargo, el principal agresor, a quien todos identificaban como quien clavó las puñaladas a la víctima y azuzó al perro para que le mordiera, según la investigación, cogió un vuelo con destino a Londres al día siguiente del suceso, por lo que continúa pendiente su detención.
La víctima fue operada de urgencia en el Hospital General de Alicante por las lesiones producidas en la cara, han informado este jueves fuentes policiales. Los tres arrestados, de entre 17 y 26 años, de nacionalidades española y rumana, declararon en dependencias policiales, y después el menor y otro de los sospechosos quedaron en libertad, a la espera de ser citados para comparecer en sede judicial, mientras que el tercero fue puesto a disposición del juzgado de instrucción de guardia de Elche.
Los hechos ocurrieron el 27 de marzo pasado en un parque del barrio de Carrús de la localidad ilicitana donde, al parecer, dos hombres habían quedado para resolver una disputa anterior, según manifestaron los testigos y la propia víctima.
Cuando esta llegó al lugar, junto con tres amigos, vio allí a la persona con quien había quedado para resolver el problema, que estaba acompañada de al menos veinte individuos más.
En un momento dado, y sin mediar palabra, uno de estos individuos le propinó lo que los testigos identificaron como un fuerte golpe en la cara a su amigo, que cayó al suelo sangrándole la cara abundantemente. Posteriormente, se pudo saber que este golpe había sido una agresión con un arma blanca.
Los agresores, aprovechando este momento de indefensión de la víctima, le clavaron un punzón en el glúteo. Además, tres le patearon y le dieron puñetazos en la cabeza.
Los acompañantes de la víctima intentaron auxiliarlo. Sin embargo, dos de los agresores le mostraron las armas blancas que llevaban, haciéndolos retroceder inmediatamente, mientras continuaban golpeando al joven. Uno de los presuntos autores, el hombre con quien la víctima supuestamente había quedado para solucionar la cuenta que tenían pendiente, azuzó al pitbull que lo acompañaba. El perro llegó a morder el glúteo al joven.
Después de la "brutal paliza", los agresores huyeron del lugar rápidamente, dejando al joven tendido en el suelo y sangrando abundantemente. Sus amigos lo recogieron y lo llevaron en un vehículo hasta el Hospital General de Elche, desde donde lo tuvieron que trasladar al General de Alicante porque tenía que recibir cirugía maxilofacial de urgencia debido a la herida producida en la cara.