Hay noches de fiesta que son fatales para nuestra cuenta bancaria. Muchas personas pierden el sentido del ahorro cuando llevan dos copas de más y empiezan a beber o invitar sin pensar en las consecuencias. Sin embargo, el caso de Maddison McGivern está en otro nivel. La joven salió de fiesta con unos amigos suyos y, al día siguiente -sin saber cómo había pasado-, tenía una deuda de 50 mil millones de dólares.
La joven aseguró que el único gasto extraordinario de aquella noche fue algún capricho con la tarjeta de crédito. "Ojalá pudiera decir que compré la ciudad de Los Ángeles, pero no es lo que pasó", asegura en TikTok, red social donde ha explicado su experiencia.
El siguiente paso, obviamente, fue intentar averiguar qué había podido pasar la noche anterior, ya que Maddison sabía que solo le quedaban 100 dólares en la cuenta corriente. En todo caso, debería haber llegado a un máximo de deuda permitido, establecido por el banco o la misma plataforma de pago.
Después de conversar durante todo el día con los trabajadores de su banco, llegó a la conclusión de que, por suerte, se trataba de un error técnico y no tenía una deuda millonaria. Después de comprobar el error, la entidad bancaria se encargó de solucionarlo y devolverle el dinero que le quedaba.
"Pon una demanda por angustia emocional" o "se trata de un error de actualización de software" son algunos de los comentarios que la joven ha recibido en las redes. En cualquier caso, se llevó sin duda uno de los sustos de su vida.