El Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA) ha condenado a una clínica oftalmológica de Oviedo a readmitir a una trabajadora al declarar improcedente su despido motivado por 176 retrasos de puntualidad en el lugar de trabajo en un período de cinco meses.
La Sala social del TSJA ha desestimado así el recurso interpuesto por la clínica contra la sentencia del Juzgado social número 6 de Oviedo que consideró que el despido era "desproporcionado" ante una respuesta empresarial "desmesurada".
El alto tribunal asturiano ha desestimado el recurso de la clínica al sostener que la empresa inicialmente toleró sus faltas de puntualidad y, "sin previo aviso, requerimiento, comunicación y sanción por falta de puntualidad", le hizo llegar la carta de despido en una respuesta que califica de "desmesurada, desproporcionada y sin razón".
En septiembre de 2021, la empresa le notificó el despido disciplinario al alegar que había cometido hasta 176 faltas de puntualidad en el período comprendido entre el 3 de marzo y el 8 de agosto de 2021.
De manera detallada, la clínica contabilizaba retrasos de hasta 6 minutos y 26 segundos por la mañana y de 8 minutos y un segundo por la tarde.