Pasear al aire libre, ver a la familia y amigos y abrazarlos y, algunos de ellos, de JxCat, viajar a Waterloo. Estos son algunos de los planes que los presos tienen pensado hacer cuando salgan indultados de Lledoners, de Puig de les Basses y de Wad-ras, según han explicado a Rac1.
Por otro lado, han expresado en declaraciones a Catalunya Ràdio que esperan su salida de la cárcel esperanzados pero con cierta incredulidad: "Hasta que no lleguen y no nos abran la puerta no nos lo acabaremos de creer", ha expresado Carme Forcadell.
El líder de ERC, Oriol Junqueras, ha dicho que una de las cosas que más ha echado de menos es pasear al aire libre "sin estar encerrado por unos muros inmensos y, por lo tanto, poder ver no sólo el cielo azul, sino los horizontes abiertos". El secretario general de Junts, Jordi Sànchez, enumera tres de las cosas que quiere hacer: una escapada a Formentera con su pareja, subir al Carlit y una ida a Waterloo para "abrazar a Puigdemont", a quien no ve desde octubre de 2017. La expresidenta del Parlament, Carme Forcadell, quiere "recuperar más de tres años" perdidos con los aniversarios de sus hijos, nietos o su madre, y recuperar también el tiempo con la familia y los amigos. Jordi Turull tiene muchas ganas de volver a Parets, y quiere subir a Josa de Cadí, ver si es capaz "de cumplir una promesa que hizo a las personas de Estremera y Soto del Real"; y abrazar "a los compañeros en el exilio". Y recuerda que, como otros, tiene una cita el 29 de junio con el Tribunal de Cuentas. Josep Rull quiere estar con sus amigos, "la pandilla de Terrassa de toda la vida": "Añoro poder hacer una comida, una cena o un desayuno". Y explica que estos días se han "blindado" ante la posibilidad de que finalmente no acaben saliendo de la cárcel manteniendo rutinas como el deporte, partidas de ping-pong o escribir cartas. E insiste: "Si alguien cree que el indulto hará que nuestras convicciones se ablanden, no se ablandarán". También Joaquim Forn tiene ganas de abrazar al expresidente Carles Puigdemont y a los exconsellers Toni Comín, Clara Ponsatí y Lluís Puig. Por eso dice que de las primeras cosas que hará será ir a Waterloo. "También quiero dar una vuelta por Cataluña y verme con todas las personas que nos han escrito y nos han apoyado. Y también tengo ganas de volver a trabajar y sentirme útil", ha explicado el exconseller, que ha lamentado que han sufrido "demasiadas decepciones" sobre su libertad. "Dejaré la televisión y el ordenador [en la cárcel] por si algún día tenemos que volver", añade. Raül Romeva ha celebrado que podrán estar mucho más con su familia y que esto condicionará mucho que puedan tener "una vida un poco más normal y humana". Y recuerda que la medida de gracia "no es ninguna garantía" de que no vuelvan a entrar en la cárcel. Dolors Bassa desea hacer "las pequeñas cosas de cada día": "Estar con la familia, con los amigos, todo aquello que cuando estás dentro de la cárcel es un día a día diferente". El presidente de Òmnium, Jordi Cuixart, ha dicho que lo primero que hará será abrazar a sus hijos y a su mujer y, después, "visitar a los miles de represaliados que, con los exiliados, recuerdan que la lucha continúa".
