Persecución por el barrio de Lloreda de Badalona. Este jueves, sobre las 16.30 horas, agentes de la Unidad Omega y de los Mossos d'Esquadra realizaron una batida para localizar al okupa que lleva meses provocando inseguridad entre el vecindario.
La Guardia Urbana de Badalona recibió el aviso de que un hombre se estaba paseando con cuchillos por la zona. Sin embargo, la búsqueda fue infructuosa, ya que no localizaron al individuo.
A pesar de no encontrarlo, el vecindario de Lloreda y de Sistrells asegura a este medio que, "a las 20.00 horas el hombre había vuelto a la barraca que okupa". Los residentes también explican que fueron las madres de los niños que acuden a las dos escuelas cercanas al local las que llamaron a la policía.
"No nos dan ninguna solución. Nos tendremos que manifestar o salir a la calle porque es indignante que los padres y madres se encuentren a plena luz del día a este hombre paseándose con cuchillos", explica indignada una vecina.
Es su modus operandi desde hace meses. Cantando y armado con cuchillos, el okupa de la Avenida Cataluña amenaza a los vecinos y a todo aquel que se le acerque. Los intentos de pararlo han acabado en violentas amenazas a los residentes de la zona.
Entre las quejas y las públicas denuncias de la ciudadanía están las críticas a la policía, que actúa "poco o nada". "Se lo llevan al coche y después lo vuelven a dejar marchar", afirmaba una vecina hace semanas a Metrópoli.
Especialmente en el barrio del Gorg es habitual la estampa. Lo más destacado desde principios de 2022 ha sido el polémico desalojo de los habitantes de la nave de la calle Progrés, muchos de ellos supervivientes del que se quemó hace un año. Los desalojados montaron tiendas de campaña y acamparon en la plaza del Contifici hasta que el Ayuntamiento de Badalona les ofreció una alternativa habitacional temporal.
