Tragedia en aguas de Cala Romántica, en Manacor. Un turista alemán de 54 años, que se metió en el mar en medio de un gran temporal para bañarse, murió ayer ahogado delante de su hijo de 11 años, que después quedó en estado de shock y tuvo que ser atendido por psicólogos. Cinco testigos se lanzaron al agua para socorrer al bañista con problemas y dos resultaron heridos por el temporal.
El extranjero y su hijo se alojaban en un establecimiento hotelero de Porto Cristo Novo y sobre las tres de la tarde fueron a Cala Romántica, donde había olas de varios metros y un oleaje fuerte. El adulto quiso bañarse y se metió en el mar con una colchoneta, pero poco después la corriente lo arrastró mar adentro y quedó a merced del temporal.
Testimonios El niño fue consciente de que su padre se estaba ahogando y pidió ayuda de manera desesperada. Cinco testigos se lanzaron al mar, poniendo en peligro su vida, y uno estuvo a punto de ahogarse. De hecho, tuvo que ser evacuado después en ambulancia hasta un hospital, con pronóstico reservado. Otro corrió la misma suerte y se lesionó las cervicales, por lo que tuvieron que colocarle un collarín. Finalmente, el grupo consiguió sacar del agua al alemán, que depositaron en la orilla, sobre la arena. No respondía y aparentemente estaba sin vida, pero a los minutos siguientes los médicos de una ambulancia, agentes de la Unidad Territorial de Costas (UTC) de la Policía Local de Porto Cristo y la Policía Nacional intentaron reanimarlo, de manera infructuosa.
Un facultativo confirmó la muerte y la empresa funeraria trasladó el cuerpo sin vida hasta el instituto anatómico forense, donde está previsto que hoy por la mañana se le practique la autopsia. Un psicólogo del 112 atendió al menor, que no reaccionaba. Los investigadores buscaron algún familiar con quien dejarlo, pero parece que había llegado a Mallorca solo con su padre, para pasar unos días de vacaciones.
