El Gobierno ya ha descartado presentar una candidatura a las próximas elecciones de los Juegos de Invierno, según ha confirmado la misma consejera de la Presidencia, Laura Vilagrà. La titular del departamento responsable de Deportes ha argumentado que el Comité Olímpico Internacional (COI) ya ha otorgado las dos próximas ediciones de los JJOO a otras sedes y, por tanto, "no hay posibilidades" de que las pueda acoger Cataluña.
Vilagrà se ha expresado así durante una atención a medios en la inauguración de la segunda edición del Totesport, un espacio lúdico deportivo para niños y jóvenes con referentes femeninos. Según ha dicho la consejera, el objetivo del Gobierno es visibilizar y "situar el deporte femenino en el lugar que le corresponde".
En declaraciones a los medios durante el certamen la consejera ha cerrado la puerta a presentar Cataluña en nuevas candidaturas para acoger los Juegos de Invierno y ha admitido que "no hay posibilidades". Según ella misma ha dicho, el COI habría escogido a Francia y Estados Unidos como próximos anfitriones de los JJOO.
El pasado sábado la secretaria del Departamento de Acción Climática, Anna Barnadas, afirmó en Catalunya Radio que la evidencia del cambio climático y la sequía que afecta a todo el territorio y también a las zonas esquiables hacen muy "difícil" que los Juegos Olímpicos de Invierno "puedan celebrarse en unas latitudes como las de Cataluña". "Se trata de un proyecto que ya no estaba en primera línea y tenemos los informes necesarios para poner mucha precaución", añadió.
Miles de euros gastados en una campaña publicitaria, estudios y ''otros servicios''
La Generalitat puso en marcha una campaña publicitaria con un vídeo promocional de unos 30 segundos que tuvo un coste de casi 330.000 euros. La plataforma Stop JJOO presentó una denuncia al síndico de agravios y a la Oficina Antifraude por la campaña impulsada por el gobierno catalán.
Sin embargo, la lluvia de millones perdidos no termina aquí. El gobierno gastó más de 170.000 euros en estudios técnicos de la candidatura de los Juegos Olímpicos de invierno.
Además, a los gastos del vídeo promocional y los estudios técnicos, hay que sumar 662.000 de otros servicios sin especificar muy bien dónde han ido a parar este dinero.
En definitiva, más de 800.000 euros tirados a la basura.
