Un 60% de catalanes está a favor de la ley de amnistía, según el tercer barómetro del año del Centro de Estudios de Opinión (CEO), presentado este viernes. Por el contrario, un 31% de los encuestados está en contra de impedir que las causas judiciales relacionadas con el procés decaigan. El estudio, que se elaboró entre el 9 de octubre y el 7 de noviembre, es decir, antes del acuerdo sobre la ley, refleja que la mayoría de simpatizantes de todos los partidos menos PP, Vox y Cs están a favor de la medida. Por otra parte, el 30,9% de los encuestados cree que la independencia es el mejor tipo de relación entre Cataluña y España, la cifra más baja desde febrero de 2012. Los partidarios de continuar como Comunidad Autónoma también suman el 31,4%.
El apoyo a la amnistía por las causas relacionadas con el 9-N y el 1-O es transversal entre las personas que se consideran de izquierdas. Tanto es así que un 83% de quienes se sitúan más anclados a la izquierda son partidarios, una cifra similar a los que se definen de centro-izquierda (78%). Por lo que respecta a los de centro, los apoyos a la amnistía (49%) siguen siendo favorables a los detractores (41%), pero por un margen más estrecho, mientras que la balanza se decanta hacia el No (49% a 43%) entre los de centro-derecha. Quienes creen tener una ideología más claramente de derechas, quienes rechazan la iniciativa superan los dos tercios (69% a 30%).
Por partidos, un 94% de los simpatizantes tanto de ERC, como de Junts y la CUP apuestan por el perdón general a las causas judiciales vinculadas al procés, así como el 83% de votantes de En Comú Podem. De forma más ajustada, quienes dicen votar al PSC también dicen Sí a la amnistía (49% a 41%). En la línea de sus direcciones políticas, los simpatizantes de Cs (59%), el PP (75%) y Vox (81%) se decantan por rechazar la medida.
Quienes prefieren seguir como Comunidad Autónoma atrapan a los independentistas
Los resultados del último barómetro del CEO también reflejan el dato más bajo en 11 años de preferencia por la independencia como forma ideal de la relación entre Cataluña y España. Con un 30,9% de apoyos, ya no es la opción más popular por primera vez desde 2012, el margen de qué ha dispuesto respecto a las demás opciones a lo largo de los años ha desaparecido. Los partidarios de una Comunidad Autónoma suman el 31,4%, la opción preferente por primera vez desde enero de 2011, mientras que quienes defienden una España federal suman el 23%, y quienes abogan por convertir Cataluña en una región, el 7%. La opción independentista tocó techo en noviembre de 2013 (48,5%) y ha sido la preferente ininterrumpidamente desde febrero de 2012 – nunca desde entonces había estado tan cerca de perder el primer puesto.
Además, en un hipotético referéndum binario de independencia, un 40,8% de la ciudadanía votaría Sí, mientras que un 51,9% apostaría por el No. Los apoyos para el voto afirmativo se sitúan en el valor mínimo desde el inicio de la serie histórica, en 2015, mientras que los del negativo, cerca de los máximos. Los que cogerían la papeleta del Sí tocaron techo en el barómetro de octubre de 2017, con un 49% de los encuestados, por un 43% de contrarios.
Por partidos, un 88% de simpatizantes de la CUP votarían Sí, una proporción similar a los de ERC (82%) y Junts (82%). El resto de partidos son en general contrarios a la independencia, incluyendo En Comú Podem (32%), el PSC (12%), Vox (8%) y el PP (6%).
Tres de cada cuatro personas, favorables a un referéndum de independencia
En cualquier caso, el 73% de los participantes en el estudio son favorables a la celebración de un referéndum, por un 21% que son contrarios. Un 84% de ciudadanos participaría en una consulta acordada, y un 76% lo haría si el referéndum fuera unilateral.
Si se celebrara un plebiscito para ratificar la Constitución de 1978, un 42% de encuestados votaría No, el doble de quienes votarían Sí, mientras que el 16% asegura que no iría a votar.
El CEO también pregunta por la independencia unilateral, que recibe el apoyo del 10% de los votantes, mientras que la vía de la plena soberanía pactada tiene el 30% de apoyos. Los partidarios de una negociación que termine con la unidad de España reúne el 32% de los encuestados, mientras que quienes quieren el mismo resultado pero sin negociación tienen el 11% de apoyos.
Peor valoración del Gobierno en un año
Por otra parte, la última encuesta también refleja que el 50% de personas aprueban la gestión del Gobierno –cuatro puntos menos que en el barómetro anterior y el peor dato en un año–, mientras que el 46% lo suspende. La nota media que los ciudadanos dan al ejecutivo es de 4,1 puntos sobre 10. En cuanto al gobierno español, la nota media es de 3,7 y el 56% de personas suspenden la gestión.
Junqueras y Urtasun, los líderes mejor valorados
En cuanto a la valoración de líderes, Oriol Junqueras (ERC) y Ernest Urtasun (Sumar) son los mejor valorados, pero con un 4,9, así que la totalidad de los dirigentes suspenden. Míriam Nogueras (Junts) saca un 4,8, mientras que Pere Aragonès y Jéssica Albiach obtienen un 4,6, por delante de Salvador Illa (4,5), Carles Riera (4,3), Miquel Iceta (4,2), Laia Estrada (4,2) y Carles Puigdemont (4,0). A mucha distancia, se quedan Lorena Roldán (2,3), Jordi Cañas (2,2), Alejandro Fernández (2,1), Ignacio Garriga (1,8) y Carlos Carrizosa (1,7).
Por partidos, es Puigdemont quien recibe una mejor valoración entre los votantes de su formación política (7,7), por delante de Ignacio Garriga entre los simpatizantes de Vox (7,3) y de Oriol Junqueras entre los de ERC (7,1).
El 60% de encuestados cree que hay demasiados inmigrantes
El problema principal de Cataluña, según la percepción de los encuestados, son las relaciones entre Cataluña y España (13%), por delante del funcionamiento de la economía (12%) y la insatisfacción con la política (11%). Por formación política, las relaciones entre las administraciones catalana y española son la prioridad para los votantes de Junts, el PSC y el PP, mientras que el funcionamiento de la economía es la principal preocupación de los de ERC. Para quienes apuestan por la CUP y los comunes, el acceso a la vivienda es el primer problema, mientras que para los de Cs es la seguridad ciudadana y para los de Vox, la inmigración.
De hecho, en general, el 60% de la ciudadanía cree que hay demasiados inmigrantes –es la opción mayoritaria en todos los partidos excepto CUP y comunes– y, el 63%, que el gobierno ha perdido el control de quién entra en el país.
