Es uno de los peores momentos del día: escuchar el despertador. Nos saca de golpe de ese momento placentero para decirnos que toca activarse, para ponernos en marcha.
No tenemos mucha opción en cuanto a escoger la hora a la que tenemos que levantarnos. Ya sea por trabajo, por querer hacer deporte o por tener que dejar en perfecto estado nuestra casa, el despertador casi va por libre.
Una circunstancia, la de levantarse, que podría cambiar por completo la forma en que la vemos gracias al estudio realizado por investigadores de la Universidad de Colorado Boulder y el Instituto Broad de MIT y Harvard.
¡Un estudio que nos habla de lo positivo que es levantarse aún más temprano!
Una hora antes, concretamente.
Esta es la variación descubierta por la ciencia que, según parece, reduciría notablemente el riesgo de que cualquier persona sufra una depresión.
Esta variable decrecería hasta un 23% en caso de empezar el día 60 minutos antes de lo que estamos habituados.