En las últimas semanas se han reportado muchos casos de usuarios que, después de recibir la vacuna de la Covid-19 de Pfizer, especialmente después de la segunda dosis, reportan haber encontrado pequeños bultos en su cuerpo, especialmente en la clavícula y la axila.
La primera reacción de muchos afectados es el miedo, ya que la aparición de bultos se suele relacionar, casi siempre, con el cáncer. No obstante, se trata de un efecto secundario bastante frecuente llamado linfadenopatías.
De hecho, está entre los 10 efectos adversos más comunes de esta vacuna que tiene registrados la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS).