Conseguir un test de antígenos hoy en día es una misión casi imposible en muchas farmacias de Cataluña. Casi a diario reciben estas pruebas de autodiagnóstico y en muchos casos se agotan en pocas horas. Una avalancha de peticiones y de ventas de un test cuyo precio se ha elevado en las últimas dos semanas, coincidiendo con la sexta ola y el incremento de contagios de COVID-19.
Cabe recordar que el precio de los tests de antígenos no está fijado como sí lo está ya el de las mascarillas y, por tanto, la farmacia es la que escoge a qué precio vender estos tests de antígenos a sus clientes. El precio está sujeto a amplias variaciones según el establecimiento y la ciudad, y es mucho más elevado que el de los vecinos europeos.
Hace un mes, estos podrían rondar los 3,50 euros, pero ahora es ya imposible encontrarlos a este precio por la alta demanda de estos. El precio medio en la actualidad por 1 test de antígenos ronda los 7-8 euros, pero los hay mucho más caros en algunas farmacias. Los ciudadanos catalanes, tal y como expresan en las redes sociales, se han llegado a encontrar con la sorpresa de tener que pagar hasta 16 euros por uno de estos tests.
Con este panorama, son muchas las personas que reclaman la fijación de precios máximos y más bajos para los tests de antígenos, como se actuó con algunas máscaras, porque muchas familias (especialmente las que tienen unos recursos más bajos) no se pueden permitir los precios actuales. Por ejemplo, el presidente del Colegio de Médicos de Barcelona (COM Barcelona) pide que se regulen los precios de estos tests. También asegura que le parece "escandaloso que estando en pandemia en plenitud no haya un precio fijado para los tests de antígenos y asequible".
