La policía francesa ha encontrado los cadáveres de cinco jóvenes, cuatro chicos y una chica, de entre 19 y 20 años en el interior de un coche sumergido en el lago Dramont, situado en la Costa Azul. Los chicos llevaban desaparecidos desde el pasado lunes cuando salieron de fiesta y ya no volvieron a casa. Todo apunta a que iban bebidos y cayeron al agua con el vehículo accidentalmente.
Los familiares de las víctimas denunciaron la desaparición de los jóvenes el martes por la noche y los amigos de los desaparecidos inundaron las redes de publicaciones pidiendo ayuda. Finalmente, este miércoles los buceadores de la gendarmería localizaron en el fondo del lago un Seat Ibiza con los cinco cadáveres. El hermano de uno de los ocupantes confirmó que eran ellos.