Una foto de Google Maps ha dejado al descubierto a un fugitivo que se escondía en España desde hacía 20 años. Gioacchino Gammino era uno de los cien fugitivos italianos más buscados hasta que el pasado diciembre se produjo un factor clave para poder localizarlo cuando lo vieron en Street View en una calle del municipio madrileño de Galapagar.
En la imagen, tomada en el año 2018, Gammino aparece hablando con otro hombre a las puertas de una frutería, de la cual era el propietario. Los agentes lo pudieron identificar por una cicatriz en la cara bastante característica. De esta forma se confirmó lo que ya sospechaban, que el fugitivo se encontraba donde sus investigaciones apuntaban.
Gammino era un miembro de la organización mafiosa Stidda y llevaba en busca y captura desde hacía dos décadas. En 1998 ya había sido detenido en Barcelona y extraditado a Italia, donde lo juzgaron por un asesinato que había cometido en 1989. El hombre fue condenado a cadena perpetua, pero en 2002 se fugó de la prisión de Roma y nadie sabía dónde estaba.
Los investigadores lo habían buscado por Alemania, Palma de Mallorca, Tenerife y Barcelona, donde tenía familia viviendo. No obstante, la realidad es que vivía en la localidad madrileña de Galapagar bajo el falso nombre de Manuel Mormino, una identidad robada a un hombre de su entorno que vive en Italia. En España, el fugitivo había comenzado una nueva vida en la que se había casado y era el propietario de una frutería y un restaurante italiano.