En 2008, se calculaba que, debido a las altas temperaturas y las extremas condiciones de sequía, el chocolate podría ser tan exclusivo como el caviar, aproximadamente en el año 2030. Sin embargo, los últimos estudios apuntan a que para 2050 ya estará totalmente extinguido.
Para afrontar la situación, la marca de chocolatinas Mars ha decidido unir fuerzas con un grupo de científicos de la Universidad de California, en Berkeley, activando un plan de choque. La solución pasa por utilizar el CRISPR, una tecnología capaz de realizar modificaciones a la carta en el ADN y el genoma.
El último informe de la National Oceanic and Atmospheric Administration afirma que el cambio climático no afectará a la generación actual de plantas de cacao, sino a la siguiente. Por lo tanto, "hay tiempo para la adaptación". Sin embargo, el 90% de los cultivos ya no serán aptos en 2050.
La agencia recomienda centrarse en cultivar razas específicas que sean resistentes a la sequía y esforzarse más por cultivar semillas de cacao utilizando un método sostenible tradicional brasileño llamado Cabruca, que consiste en plantar árboles adicionales en la selva para proporcionar sombra a los árboles de cacao, un elemento esencial que las semillas necesitan para sobrevivir.
