El comercio electrónico, al ganar peso en la Red, se ha convertido en un objetivo para los ciberdelincuentes, creando páginas web fraudulentas de venta en línea, pero también los servicios complementarios de la venta en Internet, como son las empresas de mensajería y paquetería.
Estas empresas de paquetería son las que contrata una tienda para hacer llegar a sus clientes los pedidos en línea, por lo que les proporcionan sus datos de contacto, como pueden ser su email o número de teléfono. A través de ellos, envían un número de rastreo del pedido para que el cliente pueda ver dónde se encuentra su paquete y el estado del envío.
Es en este proceso de entrega en el que debemos prestar atención a las notificaciones que nos llegan a nuestras bandejas de correo y de SMS, ya que es aquí donde podemos estar a merced de los ciberdelincuentes si no hacemos una serie de comprobaciones de seguridad.
Los ciberdelincuentes están aprovechando el auge de las compras en línea para enviar mensajes fraudulentos a los usuarios de manera indiscriminada, suplantando a empresas de mensajería haciendo referencia a algún tipo de problema, como el envío de su paquete o la entrega de este, pidiéndoles que se descarguen una aplicación, un archivo o hagan clic en un enlace para confirmar algunos datos.
A continuación, mostraremos ejemplos reales de SMS y webs a las que te redirigen los enlaces de correos o mensajes de texto maliciosos enviados por los ciberdelincuentes, en los que suplantan a una entidad de las comentadas anteriormente.
En la siguiente imagen se mostrará un ejemplo de una web clonada por un ciberdelincuente, es decir, una web imitando a la página real de un servicio de mensajería y reparto.
COMPROBACIONES DE SEGURIDAD
Actualmente, los ciberdelincuentes están explotando unas técnicas de fraude conocidas como smishing y phishing, por las cuales utilizan los SMS y correos electrónicos para obtener información sobre sus víctimas, ya sean datos personales, bancarios, etc., los cuales utilizan para cargar importes de dinero en estas cuentas o extorsionar a las víctimas con exponer sus datos a cambio de un beneficio económico. También pueden utilizar esta información para suplantar la identidad de la víctima y utilizarla para fines fraudulentos.
Pero, ¿es la única forma que tienen de comprometer nuestra seguridad? La respuesta es no. En muchas ocasiones, al hacer clic en los enlaces de estos correos y mensajes de texto maliciosos, descargamos archivos o virus en nuestros dispositivos, por lo que debemos revisar bien los enlaces y documentos adjuntos que recibimos antes de realizar ninguna acción sobre ellos.
A continuación, explicaremos qué comprobaciones debemos hacer cuando recibimos un SMS o correo de una empresa de mensajería y reparto para comprobar si realmente es quien dice ser o se trata de un mensaje fraudulento, cuyo objetivo es engañarnos para que accedamos a un enlace malicioso.
Siempre que tengas dudas de la veracidad de un correo o SMS, puedes contactar con la empresa de reparto. Busca en tu navegador la web oficial de esta empresa y llama al teléfono o correo que proporcionen. Además, muchos de estos servicios han creado un área de respuesta a incidentes para atender casos de posibles fraudes que utilicen su marca e imagen, por lo que puedes contar con ellos para que te informen sobre algún caso particular. Para comprobar que es la web oficial del servicio de reparto, revisa que la URL comience por https://. Además, debes mirar si el navegador muestra un símbolo de un candado. Al hacer clic en él, mostrará qué tipo de certificado SSL tiene instalada la web.
Hay gran variedad de virus destinados a infectar nuestros dispositivos, que utilizan como pretexto el seguimiento de un paquete, especialmente para móviles. Generalmente, intentan engañarnos para que instalemos programas maliciosos que suelen venir ocultos en una “aplicación” de una empresa de reparto para el rastreo de un paquete. Por norma general, antes de descargar la aplicación que te ofrecen a través de un enlace o mensaje, búsca-la en las tiendas oficiales de tu dispositivo, asegurándote de que es la oficial de la empresa. Nunca descargues una app a través de un QR o enlace que te proporcionen en un SMS o email.
Si recibes un enlace o archivo de una persona conocida, pero no habías pedido que te lo enviara y la explicación que te proporciona no es con el vocabulario que comúnmente utiliza contigo, confirma con esta persona que te lo ha enviado voluntariamente, es decir, que te ha enviado conscientemente este enlace y qué contiene o qué encontrarás en él. Además, puedes colocar el cursor del ratón sobre el link, sin hacer clic, para saber a dónde te redirigirá. En el caso de un móvil, puedes saber la dirección de destino del enlace presionando varios segundos sobre él.
¿Te exigen con urgencia que compruebes algo en el SMS o correo? ¡Desconfía de las prisas! Es una de las estrategias utilizadas para captar la atención de las posibles víctimas.
¿Qué pueden provocar en nuestros dispositivos estos fraudes si somos víctimas de ellos?Si descargamos un programa malicioso, no solo puede dañar o deshabilitar funciones de nuestros dispositivos, sino que también pueden monitorizar todas las acciones que se realicen desde ellos, es decir, acceder a información almacenada como fotos y vídeos, conectarse a Internet, ver el contenido de los SMS, etc., pudiéndose utilizar toda esta información en nuestra contra, como, por ejemplo, suplantación de identidad en redes sociales y otras plataformas, extorsión, etc.
Recomendaciones que te pueden ayudar a estar más protegido frente a estos programas maliciosos que puedes recibir a través de mensajes maliciosos:
Mantén tus dispositivos actualizados y protegidos con antivirus, ellos son la primera barrera defensiva contra los programas maliciosos.
Inhabilita la opción “Instalación de aplicaciones de orígenes desconocidos” en la configuración de tus dispositivos para no descargar aplicaciones no deseadas de fuentes no oficiales o desconocidas.
No descargues aplicaciones o programas a través de enlaces recibidos, búsca-los en las tiendas y webs oficiales.
Realiza copias de seguridad de tus dispositivos a menudo para no llevarte disgustos y almacena estas copias en lugares externos a tu dispositivo, como discos externos o en un servicio en la nube.
No facilites tus datos a páginas que pienses que son sospechosas o que desconoces su legitimidad.
No abras archivos adjuntos ni ejecutables sin confirmar la entidad del emisor del mensaje.Si te solicitan un pago a través de SMS o correo, desconfía y consulta directamente a las fuentes implicadas a través de otras vías, asegurándote de que son las oficiales.
