Los Mossos d’Esquadra detuvieron a cinco hombres y desarticularon un grupo especializado en robar material informático en empresas de toda Cataluña. Se les acusa de catorce robos con fuerza en empresas del Segrià, Pla d’Urgell, l’Urgell y el Vallès Occidental. El grupo se desplazaba desde el entorno metropolitano a otras comarcas catalanas y asaltaban en pocos minutos las oficinas de las empresas. La investigación comenzó a principios de julio a raíz de una serie de robos cometidos en empresas del Segrià y el Pla d’Urgell.
La noche del 10 de julio, en poco menos de dos horas, asaltaron cuatro empresas en las poblaciones de Lleida, Torrefarrera, Bell-lloc y Vila-sana. En todos los casos, después de saltar las vallas perimetrales y forzar las puertas de acceso, robaron material informático: ordenadores, portátiles, tabletas electrónicas y teléfonos móviles.
Los asaltos eran muy rápidos, de pocos minutos, ya que accedían directamente a las zonas de oficinas, donde encontraban fácilmente el material informático. Se llevaban los dispositivos electrónicos y huían del lugar sin dar tiempo a las alertas de los sistemas de alarma.
Aparte de la pérdida de los equipos, este tipo de robos suponen un perjuicio económico relevante a las empresas por la pérdida de unos equipos básicos para el desarrollo de la actividad diaria, además de la afectación que supone el paro forzoso de la actividad.
Las primeras investigaciones ya apuntaron a que se trataba de un grupo de personas que provendría del entorno metropolitano y que, a modo de razzia, se dirigía a una zona bien comunicada donde cometía los robos mientras se iba desplazando entre polígonos de poblaciones cercanas.
La noche del 10 de agosto, se produjo otra serie de asaltos en las comarcas de Ponent, en concreto en Lleida, Bell-lloc, Palau d'Anglesola y Tàrrega.
El avance de la investigación permitió relacionarlos con dos hechos más ocurridos el 4 de agosto en Rubí y el 16, en Sant Cugat del Vallès. Algunos de los responsables fueron identificados, así como los vehículos que utilizaban. La noche del 17 de agosto se produjo la última oleada de robos con la misma operativa en Terrassa, Montcada i Reixac y Sant Cugat del Vallès.
Después se estableció un dispositivo de seguimiento de los sospechosos que quedaban. El 23 de agosto fueron detenidos en un polígono de Barberà del Vallès mientras circulaban en un vehículo con cinco ocupantes. Acababan de robar en una empresa del municipio y en el maletero del vehículo los agentes localizaron doce ordenadores portátiles y un teléfono móbil. También encontraron herramientas relacionadas con los robos con fuerza como destornilladores, palancas, linternas y guantes. Los cinco quedaron detenidos. Iban con gorras y mascarillas quirúrgicas para dificultar la identificación en caso de ser grabados por cámaras de seguridad.
En total, este grupo criminal habría robado cerca de un centenar de ordenadores portátiles y una quincena de móviles y tabletas informáticas, entre otros objetos. La investigación continúa abierta para averiguar si pueden estar relacionados con otros hechos delictivos y no se descartan nuevas detenciones. Los detenidos ahora, cuatro de los cuales con antecedentes, han pasado a disposición judicial ante el juzgado de instrucción en funciones de guardia de Cerdanyola del Vallès. Tienen entre 23 y 35 años y se les atribuyen 14 robos con fuerza y pertenencia a grupo criminal.