La Policía Nacional ha evitado el suicidio de una abuela de 94 años que estaba encerrada y desatendida por su propia nieta, de 49 años. La dejaba encerrada durante largas temporadas en un piso situado en el distrito Norte. El piso no tenía buenas condiciones higiénicas, motivo por el cual se imputa a la hija un delito de maltrato en el ámbito familiar.
Según ha informado la Policía en un comunicado, los agentes descubrieron que los propios vecinos eran los que hacían llegar comida y agua a la mujer a través del balcón.
La intervención policial se inició sobre las cinco y media de la tarde cuando los agentes fueron enviados hasta un domicilio situado en el distrito Norte, donde había una anciana que estaba intentando precipitarse desde un balcón para poner fin a su vida. Una vez en el lugar, los policías pudieron acceder al piso saltando desde un balcón contiguo.
Una vez con ella, los agentes comprobaron que se encontraba nerviosa y desorientada por lo que su primera actuación fue tranquilizarla, darle seguridad y evitar un desenlace que hubiera sido trágico.