Ya queda poco para empezar a quitarse la mascarilla en el exterior. En los próximos días o semanas, los ciudadanos se podrán quitar esta pieza, tan molesta en los días de calor, aunque sólo en determinadas circunstancias.
Sólo en el exterior y siempre que se pueda guardar la distancia de seguridad con aquellos que no son convivientes ni personas que formen parte de su grupo burbuja. Por supuesto, en el campo, en la playa y cuando uno circule por una calle sin peatones.
Así lo ha indicado el director del Centro de Coordinación de Alerta y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, quien no obstante se niega a dar una fecha concreta para iniciar la reforma de la ley que obliga a la obligatoriedad en todos los espacios, exteriores e interiores.
Francia y Alemania también han apostado por el 1 de julio.