La maternidad sigue siendo una de las asignaturas pendientes del ámbito laboral. Y los estudios lo demuestran.
En estos se concluye que cuatro de cada diez mujeres entrevistadas retrasarían o han retrasado sus planes de maternidad por motivos profesionales, ya sea porque prefieren tener una situación profesional más estable (24,3%) o bien no renuncian, pero hoy por hoy no se lo plantean (15,9%).
Aquellas que tendrían más en cuenta los motivos profesionales sobre la maternidad serían las mujeres entre 25-34 años (45,6%), así como las que no tienen hijos actualmente (44,8%). Ante el 78,4% de mujeres que no renunciarían a la maternidad por su desarrollo profesional, un 21,6% sí que renunciaría.
En este caso, son las mujeres que aún no tienen hijos las que en más número llegarían a renunciar (29,4% frente al 13,8% de las que ya tienen hijos).
Los dos principales temores y retos señalados por las mujeres a la hora de quedarse embarazadas serían los motivos económicos (54,9%) y el hecho de considerar que tener hijos es una responsabilidad para toda la vida (49,7%).
