Los jóvenes de 18 a 24 años que tienen la independencia como opción preferida de relación entre Cataluña y España han caído del 47% al 27% en la última década, en beneficio sobre todo del autonomismo. Según los barómetros del Centro de Estudios de Opinión (CEO) a lo largo de los años, más de la mitad de las personas de este grupo de edad apostaban por la plena soberanía en 2013, en 2015 se situaban al umbral del 50%, y ahora están por debajo del 30% –este colectivo es el que más ha bajado en los últimos diez años. Con todo, las mismas encuestas revelan que, en el primer año de Salvador Illa como presidente de la Generalitat, los que votarían 'sí' en un referéndum de independencia se han estabilizado en torno al 40% entre el conjunto de la población.
En el último Barómetro del CEO, publicado este julio, los partidarios de ser una comunidad autónoma y los que creen que la independencia sería el mejor escenario están en situación de empate técnico con casi el 32% de los apoyos cada opción. Los federalistas se mantienen estables en torno al 22% y los que apuestan por ser una región sin autonomía se mueven en el 7%.
Entre los jóvenes, sin embargo, los autonomistas se imponen claramente a los independentistas, por más de seis puntos entre los que tienen 18 a 24 años, y por diez puntos entre la población de 35 a 49 años. La plena soberanía es la opción preferente por el 27,5% y el 26,2% de cada una de las dos franjas respectivamente, unos cinco puntos por debajo de la media. Las personas entre 50 y 64 años son las que encabezan el apoyo a una separación de España (34,6%), que reúne más adeptos que continuar como comunidad autónoma (28,1%).
El doble de jóvenes defienden ser una región sin autonomía
Ahora bien, en el segundo Barómetro de 2015 eran los adultos más jóvenes quienes lideraban los apoyos a la independencia (47,6%) por delante de autonomistas (27,8%) y federalistas (16,5%), diez puntos por encima de la media catalana. La caída de unos 20 puntos en una década es de manera clara la más acentuada de entre las franjas de edad. Entre los de 25 y 34 años, la caída es de 13 puntos y, en el resto de tramos, no pasa de cinco.
La reculada de la opción soberanista entre los jóvenes es en beneficio del autonomismo, que sube seis puntos hasta el 34,1%, y de la opción de pasar a ser una región sin autonomía, que se duplica del 4% al 8%. También, los que no saben o no responden a la pregunta sobre las relaciones entre España y Cataluña se triplican, del 5% al 15% del total del grupo de edad entre 18 y 24 años, mientras que los federalistas caen dos puntos. El conjunto de la población sigue las mismas tendencias, pero de manera muy menos acentuada.
Independencia, “sí o no”
A la pregunta directa '¿Quiere que Cataluña se convierta en un Estado independiente?', el “sí” se sitúa ahora en uno de los niveles más bajos de la última década. Según el último Barómetro de julio de 2025, la opción obtiene en concreto un 40,2% de apoyos, cuatro puntos menos que en 2015 y casi diez por debajo del histórico 49% de partidarios de la independencia que había en otoño de 2017.
Con todo, destaca que en las últimas dos oleadas del Barómetro se ha visto frenado el retroceso del independentismo, con dos pequeñas remontadas consecutivas después de haber tocado fondo en noviembre de 2024 (poco después de la llegada de Illa al Gobierno) con tan sólo un 31,6% de partidarios del “sí”. Y es que el mes de junio, coincidiendo con el último BOP publicado hasta la fecha, el apoyo a la independencia ha remontado hasta el 40,2%, ligeramente por encima de la adhesión registrada poco antes de la investidura de Salvador Illa como presidente de la Generalitat, en agosto de 2024. En este sentido, se puede decir que un año después de su llegada al Gobierno, el independentismo se mantiene en un nivel bajo pero sin retroceder.
En cuanto a la franja de edad más joven de la población (18-24), se observa claramente el descenso de los independentistas en los últimos años, desde el sentimiento mayoritario (52,1%) que había en otoño de 2017 hasta el poco más de un tercio de síes (36,3%) que apunta la última oleada del Barómetro del CEO, el último mes de junio. Es decir, los jóvenes son ahora menos partidarios de la independencia que el conjunto de la sociedad (40,2%), mientras que en octubre de 2017 se situaban ligeramente por encima de la media.
Así y todo, hay que remarcar que un año después de la llegada de Illa al Gobierno la distancia entre el sí y el no entre la juventud se ha reducido. Aunque en otoño pasado el porcentaje de contrarios a la independencia creció cinco puntos (55,7% noes, 31,6% síes), en las dos oleadas posteriores de forma consecutiva la tendencia se ha invertido hasta llegar al 45,6%-36,3% actual.
Menos de la mitad de los menores de 34 años reclaman más autonomía
A la pregunta recurrente de los estudios del CEO sobre el grado de satisfacción con el nivel de autonomía de Cataluña ("demasiada", "suficiente", "insuficiente"), actualmente hay el porcentaje más bajo de encuestados que desearían más cuotas de autogobierno: sólo el 52% consideran insuficiente el “nivel” de autonomía actual, más de diez puntos por debajo de los años álgidos del proceso, si bien es cierto que siguen siendo una mayoría social.
Y, dentro del conjunto, son nuevamente los jóvenes quienes ahora reclaman menos autonomía. La población de entre 18 y 34 son, de hecho, el único grupo social que actualmente no considera insuficiente el nivel de autonomía de forma mayoritaria. Sólo el 43,7% de los más jóvenes (18-24 años) querrían más, y un 48,3% de los de entre 25 y 34. En cuanto a los primeros, el colectivo más joven, ya hace un lustro que menos de la mitad expresan el deseo de más autonomía para Cataluña, un cambio de tendencia desde al menos el año 2015. Aquel año, de hecho, el 65,2% de los más jóvenes expresaban más deseo de autonomía (por encima del grupo de 25-34 años y de los mayores de 65 años) y tanto aquel como en 2016, este deseo está por encima del de la sociedad en conjunto.
Los jóvenes, los únicos que pasan del 5 sobre 10 en españolismo
Por otro lado, el último CEO también pregunta sobre el grado de catalanismo en una escala del 0 al 10, que equivaldría al máximo grado posible. En el último estudio, los jóvenes de entre 18 y 24 años son los menos catalanistas, con una media de 6,2 puntos, tres décimas por debajo de la media. En especial, las chicas de esta franja lo son aún menos (6,03) que los chicos (6,39). A medida que las edades van creciendo, también lo hace el catalanismo, hasta llegar al 6,7 sobre 10 entre los que tienen más de 64 años.
Por simpatía de partido, los votantes de todas las formaciones se sitúan de media por encima del 5 sobre 10 en catalanismo, excepto los de Vox. Los de Junts y Alianza son los únicos que pasan del 8, mientras que los de ERC y la CUP se acercan, Los de los comunes y el PSC se sitúan en torno al 6, y los del PP, en el 5,1, dos décimas más que los de la extrema derecha de Ignacio Garriga.
En españolismo, los porcentajes se giran, y la nota del conjunto de los encuestados es de 4,4, y la franja de 18 a 24 años es la única que pasa del 5 –en este caso, son sólo los chicos quienes superan este umbral y se sitúan en el 5,5, casi un punto por encima de cualquier otro grupo sociológico. Las personas entre 50 y 64 años son las menos españolistas, con un 4,1, y los hombres de esta franja son los únicos que bajan del 4. Por simpatía de partido, ninguno de los independentistas supera el 3 sobre 10, mientras que los comunes se quedan en el 3,7, y el PSC (5,5), PP (7,3) y Vox (8) superan el 5.
