Los mercados globales han reaccionado con contundencia a la escalada de tensiones entre Israel e Irán. El último ataque israelí, cometido durante esta madrugada del viernes, ha desencadenado un aumento vertiginoso en el precio del petróleo, con impactos inmediatos que ya se reflejan en los análisis. Hay aumentos entre un 9 y un 15%, el mayor repunte en casi un año, y se prevé que esta escalada pueda afectar directamente a los consumidores.
El precio del petróleo sigue subiendo por el ataque a Irán y la posibilidad de disminución en la oferta global de petróleo.pic.twitter.com/91rNV5YiIK
- Gabriela Siller Pagaza (@GabySillerP)June 13, 2025
El petróleo en alza: ¿qué significa para la gasolina?
El aumento de más del 15% en los precios del crudo se traduce directamente en una subida del precio de la gasolina en todo el mundo. El barril de West Texas Intermediate (WTI), referente en Estados Unidos, ha superado los 77,5 dólares, mientras que el Brent, referente europeo, ha llegado a los 78,5 dólares por barril. Esta subida es una respuesta a la incertidumbre creada por el conflicto en Oriente Próximo, ya que Irán es uno de los principales productores de petróleo y cualquier interrupción en su producción podría afectar gravemente la oferta global de crudo.
Las consecuencias para los mercados y las economías globales
La escalada de tensiones también ha tenido repercusiones en los mercados financieros. Las bolsas internacionales han registrado caídas, con índices como el S&P 500 y el Nasdaq cayendo cerca del 2%. Los mercados de divisas han visto el dólar perder fuerza, mientras que el franco suizo y el yen japonés han ganado valor, como es habitual en momentos de incertidumbre.
A medida que el conflicto evoluciona, los inversores buscan refugiarse en activos más seguros como el oro, que ha llegado a nuevos máximos históricos de 3.450 dólares por onza, y los bonos. Esta situación de “refugio de inversores” refleja la volatilidad del mercado ante la incertidumbre que provoca cualquier conflicto en Oriente Próximo, una región clave para el suministro de energía global.