El Departamento de Salud ha activado este jueves el Plan de actuación para prevenir los efectos de las olas de calor sobre la salud (POCS). El plan se suele poner en marcha a mediados de junio, pero las condiciones climáticas de este año, agravadas por la sequía, han hecho avanzar la puesta en marcha un mes y medio.
En una comparecencia ante los medios, el consejero Manel Balcells ha justificado la medida por el cambio climático. "El calor se adelanta y nosotros también debemos hacerlo", ha indicado. El plan prevé vigilancia meteorológica y recogida de datos para alertar cuando sea necesario al sistema de salud y a los diferentes actores relacionados con las personas más vulnerables.
También incluye recomendaciones a la población para evitar las consecuencias de las olas de calor.
