Los Mossos d'Esquadra y Tráfico han incorporado cuatro motocicletas 'espía' sin logotipar con el objetivo de detectar infracciones en la carretera. Cada una circula en un sentido en un radio de 20 kilómetros y alerta a la patrulla que, a través del casco con micrófono, detiene y sanciona a los vehículos infractores en el control.
Éstas son las primeras en ponerse en funcionamiento y circularán por toda Cataluña, al igual que ya hacen algunos coches también sin identificar. El jefe del área regional de tráfico de Girona, Joan Costa, ha afirmado que las motos permiten ver mejor las infracciones por "la posición del conductor" y ha detallado que no se han incorporado con el propósito de sancionar, sino de "reducir los accidentes".
Esta mañana, los Mossos d'Esquadra y el Servicio Catalán de Tráfico han estrenado las dos primeras motos policiales para detectar infracciones en un punto de Lloret de Mar (la Selva). El dispositivo ha comenzado a las nueve y cuarto y, con sólo el transcurso de la primera hora, se han multado a un total de once motoristas -por infracciones diversas como adelantar por la izquierda o en línea continua o por llevar la ITV caducada- y a dos coches -por mirar el móvil mientras estaban en circulación-. La mayoría de las sanciones impuestas han rondado los 200 euros y han supuesto la retirada de tres puntos del carnet de conducir.
Las cuatro motos previstas circulan "camufladas", sin distintivo policial y con el motorista vestido de paisano. Lo hacen en un radio de unos 20 kilómetros alrededor de un punto de control estático, situado al inicio o al final de este tramo prediseñado. Una vez detectan una infracción en la vía, la comunican a los mossos del control a través del casco con micrófono que llevan. Así, se procede a detener y sancionar a los conductores infractores.
El objetivo, según ha explicado el jefe del área regional de tráfico de Girona, es "velar por la seguridad vial" y hacerlo, sobre todo, "protegiendo a los colectivos más vulnerables", como son las motos.