El curso 2024-2025 comienza este lunes para 1.047.712 alumnos de infantil, primaria, ESO y FP básica, según la previsión del Departamento de Educación. Son 72.916 alumnos del primer ciclo de infantil, 176.988 del segundo, 447.600 de primaria, 342.074 de secundaria y 1.250 de FP básica. Entre las novedades está la aplicación del protocolo para limitar el uso del móvil, un nuevo plan de desburocratización de la gestión de los centros y la puesta en marcha de algunos planes para enderezar los malos resultados. Ante una nueva consejera, los sindicatos USTEC, CCOO y Profesores de Secundaria reclaman más recursos, dignificar la profesión docente y mejorar la gestión por parte de la consejería.
Por titularidad, habrá 901.267 estudiantes en el sector público, 21.802 en el privado y 339.423 en el concertado en el régimen general. Esto suponen 512 alumnos más en la pública, 1.247 más en centros privados y 5.515 menos en los concertados.
Este curso continúa la reducción de ratios y se completa en todo el segundo ciclo de educación infantil. Así, 7.894 grupos tendrán la ratio reducida a I3, I4 e I5, siendo 18,28 alumnos la ratio media en I3. En concreto, 1.988 grupos de la pública (94%) tienen ratio 20 o inferior y 711 en la concertada (79%).
Más de 82.000 dotaciones docentes y 18.295 nuevos funcionarios
En cuanto a los docentes, habrá 82.277 dotaciones, con un incremento de 301 en FP y 218 de inclusiva. En concreto, serán 38.865 dotaciones de maestro y 43.412 de profesorado. Como novedad este curso, se han estabilizado 18.295 docentes. Además, se pondrá en marcha el grupo estable de sustituciones, para lo que Educación recibió 15.000 solicitudes para 2.145 plazas, de las cuales sólo faltan unas once por cubrir.
Por otra parte habrá 4.408 dotaciones de Personal de Administración y Servicios (PAS), 80 más; y 3.681 de Atención Educativa (PAE), 321 más.
También se pone en marcha una dotación de 52 educadores sociales en los servicios educativos y 12 plazas de logopedia.
En cuanto a los centros, habrá tres nuevos: el Instituto Escuela Mas Lluí de Sant Just Desvern, la Escuela Joan Domènech i Moner de Lloret de Mar y la Escuela Pedraforca de Saldes. Abrirán también las puertas 13 nuevos edificios y durante el curso se prevén dos más.
Nuevo curso y nueva consejera
El inicio de curso coincide con el estreno de Esther Niubó al frente del Departamento de Educación. Niubó tomó posesión del cargo el 12 de agosto y, como ella explicó en rueda de prensa el viernes, su tarea hasta ahora se ha centrado mayoritariamente en garantizar un buen inicio de curso.
La consejera ha fijado la mejora de los resultados educativos como una de las principales prioridades de cara al nuevo curso y la nueva legislatura, así como atender al alumnado con más dificultades.
Los sindicatos reclaman más recursos y una mejor gestión
El hecho de que sea una nueva consejera y un nuevo equipo los que capitaneen Educación ha hecho también que muchas de las peticiones de la comunidad educativa en este inicio de curso vayan un poco más allá y reclamen también cambios más generales en cuanto a la política educativa del
En este sentido, la portavoz de USTEC, Iolanda Segura, ha pedido en declaraciones a la ACN "enderezar la educación del país" y ha situado la mejora de la financiación como una de las primeras prioridades a abordar. Y es que Segura ha lamentado que hace años que el sistema está infrafinanciado y esto hace que los centros no tengan los recursos suficientes para encarar el curso cubriendo las necesidades que tendrán, especialmente en lo que se refiere a la escuela inclusiva. Segura ha reclamado también una dignificación de la profesión docente y del personal de atención educativa, recuperar el poder adquisitivo perdido -que el sindicato cifra en un 20% en 10 años-, recuperar la "democracia" en los centros y defender la vehicularidad del catalán, entre otros. Además, ha pedido que la inclusión de la Formación Profesional en el nombre de la consejería se traduzca en medidas concretas que permitan incrementar la demanda.
Desde CCOO, la secretaria general de Educación, Teresa Esperabé, ha considerado que el nuevo curso necesita "escucha y negociación" por parte del nuevo equipo para poner fin a años "muy convulsos" en el sector. Más allá de esto, y coincidiendo con USTEC, ha pedido incrementar los recursos hasta alcanzar el 6% del PIB pero también impulsar diversas medidas para mejorar los resultados educativos. En este sentido, ve prioritario reducir las ratios en la ESO, hacer efectiva la escuela inclusiva y poner fin a la segregación. "Si no ponemos recursos, no acabamos con la segregación y no bajamos las ratios será muy difícil que sólo con manuales y programas lo podamos revertir", ha declarado.
En el ámbito de secundaria, el secretario general del sindicato Profesores de Secundaria, Xavier Massó, ha pedido también un "cambio de rumbo" tanto a escala educativa como de gestión. En el primer ámbito ha defendido volver a la "instrucción directa" porque el modelo competencial está demostrando ser un "fracaso". En cuanto a la gestión, ha criticado el "desastre monumental" de los destinos docentes de verano y ha pedido también derogar el decreto de plantillas para poner fin a la "arbitrariedad" en las designaciones docentes.
Confían en que mejore el diálogo con la consejería
Los cuatro agentes consultados por la ACN han coincidido en mostrarse a la expectativa de si realmente hay un cambio de talante por parte de la nueva consejera y su equipo, en comparación con el que lamentan tuvieron los consejeros de ERC. Segura ha confiado en que se pueda materializar un cambio de rumbo y que haya un verdadero diálogo y negociación ya que ha defendido que "no se puede gobernar de espaldas a la comunidad educativa".
Niubó se ha ido reuniendo con todos ellos durante los primeros días al frente de la consejería. Un encuentro que, en el caso de CCOO, fue positivo porque "hubo escucha". Ahora, el sindicato dará "los 100 días de gracia" a Niubó para ver las primeras políticas que impulsa porque "las palabras se demuestran con hechos".
Por su parte, Massó se muestra optimista, ya que en el encuentro que mantuvieron con la consejera percibieron un talante "muy diferente" y cree que son conscientes de que la educación en Cataluña "está a punto de implosión".