Los hogares catalanes tiraron a la basura más de 173.000 toneladas de alimentos el año pasado. Son 63 kg de comida por hogar que nunca llegaron al plato. Esta pérdida tiene un coste económico enorme: 902 millones de euros en total, es decir, 330 euros por familia y 112 euros por persona. Aún más: toda esta comida podría nutrir a cerca de 275.000 personas durante un año. Los datos forman parte del estudio sobre el despilfarro alimentario en los hogares de Cataluña encargado por el Departamento de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación, y elaborado por los centros de investigación CREDA e IRTA.
Para revertir esta situación, el Gobierno pone en marcha la cuarta edición de la campaña “Aprovechemos los alimentos”. Cada pequeño gesto cuenta: aprovechar las sobras, planificar mejor las compras y conservar correctamente los alimentos son acciones que, multiplicadas por toda la sociedad, pueden marcar la diferencia. Pero el despilfarro no se origina sólo en los hogares: sino que se produce a lo largo de toda la cadena alimentaria —desde el campo hasta los puntos de venta— por causas tan diversas como la climatología, los criterios estéticos, el desajuste entre la oferta y la demanda. Por eso, la lucha contra el despilfarro requiere la implicación de todos los actores, desde los productores hasta los consumidores.
“Aprovechemos los alimentos”
La campaña del Gobierno se enmarca en torno al 29 de septiembre, Día Internacional de la Concienciación sobre las Pérdidas y el Despilfarro Alimentarios, y cuenta con la colaboración y participación del sector de la restauración, la Fundación Espigoladors, la Plataforma Aprovechemos los Alimentos, la Oficina Conjunta para la Alimentación Sostenible así como otras entidades y organizaciones del sector agroalimentario.
La campaña de este año ofrece las comidas Gastrorecup, la Maratón de Espigoladas y la Gran Comida de Aprovechamiento Alimentario, que este año tendrá lugar en Vic.
Restaurantes contra el despilfarro
Las comidas Gastrorecup se celebra del 30 de septiembre al 31 de octubre con una idea clara: la comida que sobra puede convertirse en un plato delicioso, demostrando que la creatividad en la cocina es una herramienta poderosa contra el despilfarro.
Autor: Departamento de Agricultura
La edición de este año reúne a 65 restaurantes gastronómicos de Cataluña. Participarán 31 establecimientos en Barcelona, 7 en Tarragona, 13 en Lleida y 14 en Girona, ofreciendo menús que sensibilizan sobre la importancia del aprovechamiento de los alimentos y las prácticas sostenibles en la restauración.
Maratón de espigoladas
El sábado 4 de octubre llega la 5a Maratón #JoEspigolo, con espigoladas simultáneas en diferentes puntos de Cataluña: Terres de Lleida, Camp de Tarragona, Parc Agrari del Baix Llobregat y el Alt Empordà. El año pasado, los participantes recuperaron 12.128 kg de alimentos, destinados a entidades sociales. El espigolamiento consiste en recoger frutas y verduras de los campos que han sido descartadas del circuito comercial, pero que aún son perfectas para el consumo.
Por otro lado, el domingo 5 de octubre tendrá lugar la Gran Comida de Aprovechamiento en Vic, que reunirá a unas 400 personas para disfrutar de una comida gratuita preparada con alimentos recuperados. Los chefs de Osona Cuina liderarán la jornada, que incluirá talleres, cocina en directo y una parada de frutas y verduras espigoladas.
Además, en el marco de las fiestas de la Mercè 2025 y la Feria de Sant Miquel de Lleida, se organizarán actividades de sensibilización sobre la prevención del despilfarro en los servicios de distribución gratuita de alimentos.
¿Qué alimentos se despilfarran más en los hogares?
Las frutas y las verduras encabezan la lista, con un 22% y un 21% del total despilfarrado respectivamente. Los productos de origen animal —carne, pescado, huevos y lácteos— suman un 22%. Entre los alimentos cocinados, las ensaladas representan un 12,5%, los platos de pasta un 12,4% y los platos de carne y pescado casi un 10%. La pasta y el arroz, junto con las legumbres, también son de los más desaprovechados. Un 16% del despilfarro se debe al aspecto físico de los alimentos, mostrando que a menudo rechazamos productos simplemente porque no parecen “perfectos”.
¿Causas de la comida tirada en casa?
Los hábitos de consumo de la población son una de las principales causas de despilfarro alimentario en los hogares: incorrecta planificación de la compra, mala gestión de las fechas de consumo preferente y las fechas de caducidad, la ausencia de reaprovechamiento y la cantidad de alimentos cocinados sobrantes, así como el rechazo de productos por el aspecto físico.
De hecho, cada catalán tira de media 21,56 kg anuales de comida al año. Del total de estos alimentos, se ha estimado que el 70% de los alimentos tirados son alimentos no cocinados. Y sólo un 16% de los consumidores reconoce que despilfarra. La mayoría subestima la cantidad real que tira, especialmente productos animales como la carne y los embutidos.
Impacto ambiental
En cuanto al impacto ambiental sobre el planeta, el despilfarro alimentario, transformado en emisiones de CO₂, equivale a 21.716 vuelos de 200 pasajeros de Barcelona a Bruselas. Concretamente, el despilfarro genera 462 millones de kg de CO₂ equivalentes, el equivalente a las emisiones anuales de 73.000 personas.
La campaña “Aprovechemos los alimentos” se enmarca dentro de la Estrategia Alimentaria de Cataluña 2024-2028 del Departamento de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación, que tiene como finalidad avanzar hacia un modelo alimentario más sostenible, transformador y fundamentado en la economía circular en Cataluña.