El cuerpo sin vida de una niña de 13 años apareció este sábado apoyado en un árbol en medio de la calle en la ciudad de Viena. La menor presentaba signos evidentes de haber muerto de forma violenta. Como no podía ser identificada, la policía austríaca publicó una descripción de la niña y al día siguiente unos padres se acercaron a una comisaría convencidos de que era su hija. Cuando les enseñaron las fotografías a los policías, estos lo confirmaron.
La autopsia de la menor confirmó que había muerto estrangulada después de que la hubieran drogado. En un principio no parece que hubiera una agresión sexual, aunque todavía se está investigando. Además, los policías apuntan a que el lugar donde se encontró el cadáver no era el escenario del crimen, sino que la habrían matado en un domicilio o espacio privado y después habrían dejado el cuerpo inerte en medio de la calle, según publica Kurier.
La investigación policial ha llevado a las primeras detenciones este lunes. Dos adolescentes de 16 y 18 años han sido arrestados como los presuntos autores del asesinato. Por ahora, la investigación sigue abierta para averiguar más detalles sobre este macabro asesinato de una menor.