En dosis elevadas puede resultar peligroso, ya que provoca mareos, bajadas de tensión, pérdida de memoria y, en última instancia, psicosis. Este es el caso del óxido de nitrógeno también conocido como "gas de la risa" y su inhalación puede provocar una corta sensación de euforia. A pesar de estos efectos, el óxido de nitrógeno no es ilegal y, de hecho, se puede encontrar en cualquier establecimiento comercial dentro de los espráis de nata.
Este gas se emplea para conservar la consistencia de la nata cuando sale del bote, pero la Policía Nacional alerta de que en los últimos tiempos los jóvenes tienden a inhalarlo para obtener esta sensación de euforia. En España ya se produjeron dos accidentes en Marbella, donde dos jóvenes resultaron heridos después de saltar de un puente habiendo inhalado óxido de nitrógeno.
En Estados Unidos, esta tendencia es mucho más acentuada y se ha convertido en casi una moda. Tanto es así que, a partir de hoy mismo, se prohibirá la venta de espráis de nata a menores de 21 años. Aquel que venda un bote de espray de nata a menores de 21 años se enfrenta a una multa de 250 dólares. El impulsor de esta ley ha sido el senador Joseph Addabbo, después de detectar un uso irregular de este gas.
