La Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Tarragona, ha decidido que Carlos, el hombre acusado de matar a su pareja en julio de 2022 en La Morera de Montsant (Priorat), siga en prisión provisional debido al elevado riesgo de huida del sospechoso y también de destrucción de pruebas, según el Diari de Tarragona.
Paralelamente, los magistrados recuerdan que está pendiente hacer una búsqueda del cadáver a propiedades del sospechoso y de su familia así como tomar declaración a personas de su entorno.
Mónica, conocida como ‘La Vasca’, convivía con Carlos en la casa de los abuelos de éste, pese a que tenía una hija que vivía con sus padres. La relación de la pareja era complicada con constantes discusiones y supuestos malos tratos por parte de Carlos.
El 21 de julio de 2022, Mónica quedó en Reus para comer con una amiga, pero no se presentó. Una semana después la familia interponía una denuncia por desaparición, ya que, pese a que Mónica llevaba una vida desordenada, habían operado a su madre y no se había puesto en contacto con ella.
Todas las sospechas cayeron sobre Carlos, pero a pesar de los registros en sus propiedades y las contradicciones en que incurrió en los interrogatorios, los investigadores no pudieron encontrar pruebas concluyentes contra él ni tampoco el cadáver de Mónica.
INGRESO EN PRISIÓN
No obstante, el 12 de noviembre arrestaron a Carlos y un día después ingresaba en prisión por orden del Juzgado de Instrucción número 1 de Valls.
Para la Audiencia Provincial, hay «indicios de participación activa, directa y relevante» del acusado en la desaparición de Mónica, y han considerado demostrado que ésta venía sufriendo malos tratos por parte de su pareja.
Unos malos tratos que la víctima se habría encargado de recopilar en forma de fotos y audios, y que se encontraban en un ordenador portátil de su propiedad, concretamente en una carpeta que llevaba el nombre de Carlos.
Los testigos también indicaron que la chica tenía intención de poner fin a la relación sentimental y su propósito era marcharse de la Mora de Montsant, precisamente en las fechas en las que desapareció.
Las llamadas telefónicas que Carlos hizo, la madrugada de la desaparición, con el teléfono de la víctima, llamando a su propio número móvil, para –según los Mossos– tener una coartada, y el hecho de que lo encontraran en casa de Carlos durante un registro, también han pesado en la decisión.
¿DÓNDE ESTÁ EL CUERPO?
Los investigadores sospechan que Carlos escondió el cadáver la víctima y sus pertenencias por los alrededores de La Morera. Por ello, se harán una serie de búsquedas en terrenos a los que tenía acceso Carlos, terrenos que son de su propiedad o de su familia. También se debe tomar aún declaración a numerosas personas, algunas de ellas del entorno del propio investigado.