El pleno del Ayuntamiento de Barcelona ha dado luz verde al Plan especial urbanístico y de mejora urbana que permitirá crear una decena de nuevos ejes verdes en el sector del 22@.
La teniente de alcaldía de vivienda, Laia Bonet, ha defendido que la medida permitirá asegurar un mínimo del 33% de espacios libres exclusivos para zonas verdes y peatones y sacar adelante reurbanizaciones tan destacadas como la de la calle Badajoz, que se transformará en un eje ciclista y ciudadano en el que se pacificarán cinco cruces, entre ellos la de la escuela Vora Mar. La medida ha salido adelante con los votos a favor del PSC, ERC, Junts y el PP, la abstención de BComú y el voto contrario de Vox.
Laia Bonet ha explicado que el Plan se desprende de la modificación del Plan General Metropolitano (PGM) que se hizo en el año 2022 cuando surgió la necesidad de hacer crecer la vivienda en la zona y al mismo tiempo hacer aflorar más verde para dar cumplimiento a los estándares urbanísticos. Esta modificación proponía una estructura urbana de doble malla para el espacio público viario y los clasifica en tres tipos: ejes cívicos, ejes verdes ambientales y ejes rodados básicos.
El Plan que se ha aprobado ahora se centra en los ejes verdes ambientales y fija pautas para los proyectos de urbanización de los diferentes tramos de este ámbito. Con esta propuesta, las actuaciones se realizarán a partir de tres opciones de un catálogo predeterminado, combinándolas según las necesidades específicas de cada ubicación y la tipología de tramo en que se encuentre.
La teniente de alcaldía de Urbanismo, Transición Ecológica, Servicios Urbanos y Vivienda, Laia Bonet, ha celebrado la aprobación de este Plan Especial, ya que permitirá desencallar de forma inmediata la transformación de la calle Badajoz para que sea un eje ciclista y ciudadano, y tendrá efectos sobre otras actuaciones como las de las calles Pere IV y Cristóbal de Moura y en la urbanización de todo el ámbito de Can Ricart para abrirlo al vecindario.
Soluciones flexibles y compatibles con el paso del bus
Bonet ha asegurado que el plan ofrece un catálogo de soluciones “flexibles” para poder sacar adelante unas pacificaciones “muy necesarias” y que no vayan en detrimento del transporte público.
Ha detallado que se definen unos ámbitos sin flexibilidad, que son los que tienen una configuración fijada por ser proyectos de urbanización ya aprobados o ejecutados, y otros tramos con flexibilidad, donde los proyectos de urbanización podrán escoger entre las opciones del catálogo que se podrán implementar de forma autónoma en cada proyecto de urbanización.
Así, ha dicho que en función de las necesidades de tramo de calle se optará por una medida u otra: “Queríamos que hubiera la opción de que el verde permitiera el paso directo sin necesidad de obligar al giro, lo que imposibilitaría el paso del bus en todas las calles donde se implementamos los ejes verdes del 22@”, ha comentado Bonet que ha dicho que no puede ser que la pacificación implique impedir el paso del bus al respecto. barrio.
La concejala de BComú Gemma Tarafa se ha mostrado crítica con esta decisión y ha señalado que sin los giros obligatorios no se garantizan las calles seguras. Al mismo tiempo, ha defendido una política de movilidad y sostenibilidad que “responde a la salud” de los vecinos.
Por su parte, el portavoz de Junts per Barcelona, Damià Calvet ha destacado la necesidad de “cohesión territorial”, la de ERC Eva Baró ha subrayado que la modificación “no puede esperar más”. Finalmente, el concejal del PP Víctor Martí de Villasante ha reivindicado que los ejes verdes no son su “modelo” de ciudad y el de Vox Liberto Senderos ha dicho que los ejes verdes son “rojos” por la “prohibición” que implican para “circular libremente”.