Cinco personas han sido detenidas por la policía española acusadas de robar 7.000 cajas de benzodiacepina de los almacenes de la empresa de distribución de medicamentos donde trabajaban para venderlas de forma fraudulenta. Los arrestados prestaban los servicios laborales en almacenes de Viladecans (Baix Llobregat), Fuenlabrada (Madrid) y Dos Hermanas (Sevilla). El fármaco sustraído tiene efectos ansiolíticos y está sujeto a prescripción médica. La policía explica que se consume mezclado con hachís, alcohol o cola para potenciar el efecto hipnótico, en una droga resultante que se conoce como ‘karkubi’. La investigación ha acreditado la sustracción de las 7.000 cajas individuales, más de 400.000 comprimidos del medicamento.
La investigación comenzó cuando el representante de una empresa distribuidora de medicamentos puso en conocimiento de la policía que había detectado errores contables en algunos de los fármacos almacenados, especialmente destacables en el caso de la benzodiacepina. Al mismo tiempo manifestó sospechas de que podían haber sido sustraídos por empleados de la compañía.
Según la policía el ‘karkubi’ recibe este nombre por el bajo coste que tiene y por el acceso fácil. Habitualmente la benzodiacepina necesaria para elaborarlo se conseguía en las farmacias a través de recetas falsas, pero el refuerzo en el control de la dispensación y la receta electrónica ha llevado a los delincuentes a acudir directamente a proveedores y mayoristas.
Así, la investigación permitió corroborar que, en el caso mencionado, eren cinco trabajadores los que sustraían el medicamento para revenderlos posteriormente de forma ilegal y a precios muy elevados. Todos se aprovechaban del puesto de trabajo, de los horarios y del conocimiento de las naves y de sus puntos ciegos para robar cajas enteras del medicamento. Cada caja contenía, a su vez 192 cajas individuales, unos 5.700 comprimidos.
