La Guardia Urbana de Barcelona llevó a cabo el pasado miércoles una de las intervenciones más importantes de este año. La Unidad Central de Tránsito estaba realizando inspecciones al transporte de mercancías cuando localizaron a un conductor drogado que transportaba más de 18.000 kilos de un gas inflamable.
Tal y como ha recogido El Caso, el conductor había consumido una mezcla de cocaína, anfetaminas y opiáceos que muy posiblemente habrían provocado un accidente en la carretera. El trayecto del camión se iniciaba en la Zona Franca de Barcelona y tenía que trasladar la carga hasta Francia, lo que podría haber provocado un accidente muy grave.
La policía llevó a cabo 18 inspecciones a camiones de mercancías cuando localizaron al conductor en cuestión. Este era el responsable de una carga de 18.420 kilos de un gas altamente inflamable, por lo que fue denunciado penalmente y el camión fue inmovilizado para evitar una tragedia.