Unas 43.000 personas vibraron ayer por la noche en el concierto de Omar Montes en el paseo Marítimo de Badalona, justo después de la Quemadura del Demonio en la popular noche de San Anastasio de las Fiestas de Mayo. La gran presencia policial, con dispositivos tanto de la Guardia Urbana como de los Mossos d’Esquadra, que garantizaron la seguridad durante todo el evento, así como la actitud ejemplar de los asistentes, hicieron posible que el concierto finalizara sin ningún incidente de gravedad, a pesar de la gran afluencia de gente. Únicamente se tuvo que dar atención médica a algunos jóvenes por consumo excesivo de alcohol y dos personas fueron trasladadas al hospital.
El alcalde de Badalona, Xavier Garcia Albiol, ha destacado la coordinación entre los diferentes cuerpos policiales y el dispositivo especial desplegado para asegurar que el evento se desarrollara con normalidad. “Hemos desplegado el dispositivo más grande de los últimos años, con efectivos de Guardia Urbana y de Mossos d’Esquadra, con unidades de Seguridad Ciudadana, ARRO y BRIMO, que han sido claves para garantizar que la fiesta se desarrollara con normalidad y sin incidentes graves”, ha explicado García Albiol. “Badalona ha demostrado una vez más que sabemos gestionar eventos multitudinarios con la máxima seguridad gracias a la coordinación policial”.
Por otro lado, el Plan de autoprotección implementado por el Ayuntamiento de Badalona durante la Quemadura del Demonio cumplió sus objetivos, consiguiendo que el acto más emblemático de las Fiestas de Mayo se desarrollara sin incidentes. La medida, que responde al requerimiento de la Generalitat de Cataluña para eventos de gran afluencia, permitió gestionar de manera óptima la concentración de hasta 36.000 personas en el paseo de la Rambla, con el apoyo de un dispositivo de 77 informadores y auxiliares de seguridad, además de un amplio despliegue de la Guardia Urbana y Mossos d’Esquadra.
La estrategia incluyó dos anillas de control para distribuir los flujos de gente entre las calles de Mar y de Prim. En ningún momento se llegó al límite de personas permitidas en el tramo central de la Rambla, motivo por el que no se llegaron a cerrar los accesos. Además, el operativo se coordinó desde el centro de control de la Guardia Urbana, con apoyo de drones policiales y patrullaje aéreo y marítimo de los Mossos d’Esquadra.
Después del Baile en la plaza de la Vila, el Seguici de la ciudad, el Acto Sacramental y el Ball de l’Àliga, la Nit de Sant Anastasi continuó con el espectáculo Badalona: una ciudad de sueño de 500 drones – 300 más que el año pasado- que iluminaron el cielo haciendo un recorrido por la historia y los principales símbolos de Badalona. Este espectáculo fue seguido del Piromusical y del momento culminante de la fiesta, la quemadura del Demonio, este año “El Voluntario más endiallado”, obra de Jason Sánchez y construido por Carles Piera.
