El sindicato CSIF ha alertado sobre las “condiciones infrahumanas” que se viven en el Centro Penitenciario de Ponent, en Lleida. Según el sindicato, el equipamiento se encuentra en una situación de “desatención institucional”, con condiciones de trabajo “indignas” para los funcionarios y con una infraestructura en estado de deterioro avanzado. Ante esta situación, CSIF exige a la Generalitat de Cataluña que destine los recursos necesarios para la construcción de una nueva cárcel en Lleida, una promesa que hace años que se comprometió sin materializarse.
Esta falta de recursos ha provocado que el CP de Poniente llegue a una situación límite, con problemas graves como plagas de escarabajos, ratas y chinches. Además, el sindicato denuncia la falta de medidas de seguridad adecuadas, lo que pone en peligro tanto la seguridad de los trabajadores como la convivencia dentro del centro penitenciario.
El CSIF destaca que el Plan Director de Equipos Penitenciarios, aprobado en 2004, contemplaba la construcción de nuevos centros penitenciarios en Cataluña, como el de Mas d’Enric, Puig de les Basses y Lledoners, pero dejó Lleida “en el olvido”.
CSIF exige una actuación política decidida para solucionar esta situación crítica y pone de relieve que la prisión de Poniente se encuentra en un estado estructuralmente obsoleto, llegando a un punto donde “literalmente se cae a trozos”.
