El anticiclón que se ha instalado en Cataluña provoca registros de temperaturas excepcionales para la época superiores a los 20 grados en la costa y el Pirineo pero al mismo tiempo favorece la presencia de nieblas en las hondonadas y sobre todo en el llano de Lleida.
Es la otra cara de esta primavera avanzada que se vive en buena parte del país menos. en Poniente, donde las temperaturas se mantienen frías y las horas en que se puede ver el sol son pocas. El campesinado celebra que se haya instalado la niebla ya que permite que las fincas retengan la humedad aportada por las lluvias que han caído este mes.
Asimismo también se retrasa la floración de los frutales, que para ir bien, no debería empezar hasta mediados o finales de febrero.
El responsable de la fruta dulce de Unió de Pagesos, Jaume Gardeñes, explica que los árboles frutales necesitan muchas horas de frío en invierno para que se puedan detener y descansar antes de empezar el proceso de floración y crecimiento de la fruta.
En este sentido, se calcula que los árboles de fruta de hueso necesitan unas 700 horas de frío, y los de semilla entre 900 y 1.400 en lo que se podría calificar como un “invierno normal”. Según datos de la estación meteorológica de la Escuela de Capacitación Agraria de Balaguer, este año parece que se acabará alcanzando estos registros y la niebla y el anticiclón contribuyen en parte.
Y es que si en Poniente no hubiera niebla, los campesinos se encontrarían que la tierra se secaría nuevamente de forma muy rápida y los más de 40 litros en lluvias registradas este enero, ya se habrían desvanecido.
En cambio, con la niebla se mantiene la humedad en el terreno y el cereal de invierno sale muy beneficiado. De hecho, hace una semana había muchas peticiones de riego avanzado al canal de Urgell que tras la lluvia del viernes pasado ya se han anulado porque las fincas tienen suficiente agua.
En concreto, no habrá que regar hasta marzo, que es cuando se da el pistoletazo de salida de la campaña de regadío.
El presidente de Asaja en Lleida, Pere Roqué, ha recordado que el frío ha tardado en llegar este invierno y hasta mediados de diciembre los termometros no empezaron a tirar hacia abajo.
En este sentido, también ha mostrado satisfacción por la persistencia de las nieblas ya que en otras zonas del Estado donde no las hay como Murcia, se ven afectados por las elevadas temperaturas. y esto acabará anticipando la floración con el riesgo de que posteriormente haya heladas tardías que podrían provocar serios daños como los de hace un par de años.
Por todo ello, el sector desea que el anticiclón se quede todavía unos días en el país para poder disfrutar así de los beneficios invernales aunque también es consciente de que perjudica en otros ámbitos como puede ser en la conducción, ya que se reduce mucho la visibilidad.
En cualquier caso, los campesinos mantienen la vista puesta en el cielo y en la necesidad de que llueva aún más antes de que termine el invierno y comience la temporada de riego ya que las reservas en los embalse siguen siendo escasas.
