El alcalde de Tortosa, Jordi Jordan, acompañado de la teniente de alcalde, Mar Lleixà; la concejala de Sanidad, Sònia Rupérez; y la directora de la GESAT, Matilde Villarroya, han comparecido en una rueda de prensa con el fin de explicar a la ciudadanía que el centro hospitalario y residencia de la tercera edad, el Hospital de la Santa Creu de Jesús, se encuentra en una situación económica muy crítica con un déficit estructural de 1,62 millones de euros que obliga al Ayuntamiento de Tortosa a recurrir a los departamentos de Salud y Derechos Sociales de la Generalitat de Cataluña para que les ayuden a hacer frente a esta situación. gasto, garantizando la continuidad del hospital.
Este hecho sale a la luz después de que el actual gobierno municipal encargara una auditoría a la empresa gestora del centro. Unos resultados que ya temían y que son fruto de una mala gestión perpetuada a lo largo de los años por parte del anterior equipo de gobierno de la exalcaldesa, Meritxell Roigé, y del también miembro del partido, exalcalde de Jesús y exconsejero delegado de la sociedad municipal de GESAT, Pere Panisello, que debemos recordar que cesó del cargo en 2018 tras ser investigado por la Unidad Anitcorrupción de los Mossos d’Esquadra por irregularidades en la gestión del propio Hospital de la Santa Creu de Jesús.
“La mala gestión de la anterior alcaldesa, Meritxell Roigé, y de los anteriores equipos de gobierno han llevado al hospital municipal hasta el límite, a punto de su cierre. Ella lo sabía y no hizo nada durante cada año de mandato para solucionar este problema”, ha remachado Jordan, recordando que “iremos hasta las últimas consecuencias para que, si hay irregularidades, las asuman todos aquellos que las tengan que asumir”.
Y es que el anterior gobierno aprovechó la brecha de la solicitud de recursos extraordinarios para conseguir salvar las finanzas del centro sanitario, año tras año, y justificar así su cierre en positivo. Una medida que aún estuvo mucho más justificada en el año 2020, a raíz de la pandemia de la Covid-19. Ahora bien, tal y como recuerda Jordan, esto “no pretendía solucionar el problema de base que tenía el hospital”.
Una situación que, principalmente, afecta al área de la residencia de la tercera edad del hospital, en la que se han detectado irregularidades contractuales con los trabajadores del centro. Jordan ya se ha reunido con los representantes sindicales de los trabajadores y con los gerentes y ha asegurado que “los trabajadores no tienen que sufrir por sus puestos de trabajo, solo queremos seguir garantizando la calidad sanitaria y que no disminuyan los servicios esenciales que se ofrecen en el centro”.
Asimismo, hay prevista otra reunión con el consejo administrativo de cara a la semana próxima, en la que se les expondrá la situación actual del centro sanitario. Un centro que es totalmente prioritario para la población de Tortosa, pero del que también son usuarias muchas personas del resto de las comarcas del Ebro. De hecho, Villarroya ha apuntado que, actualmente, la residencia de la tercera edad se encuentra al 100% de su empleo y que cuenta con más de 500 trabajadores en total, entre personal eventual e interino.
Así pues, el centro, que depende al cien por cien del Cat Salut, es estudiado por un grupo de trabajo conjunto entre el Ayuntamiento y el Gobierno de la Generalitat con el fin de buscar una solución consensuada que ponga fin al problema. El consistorio asegura que las conversaciones ya están iniciadas y que, a pesar de haber unas elecciones en Cataluña para el próximo 12 de mayo, eso no impedirá que se siga negociando sea cual sea el color político del nuevo gobierno. En cuanto a los plazos, se tiene previsto tener una primera respuesta antes de la finalización de este curso político.