El Ayuntamiento de Manresa pondrá en marcha en 2025 un plan de gestión ética para las colonias de gatos comunitarios en la ciudad, donde hay un millar de ejemplares de esta especie. Se trata de un plan desarrollado con el apoyo de la Fundación Fauna y que se alinea con la Ley de Protección Animal. Tiene como principal objetivo garantizar el bienestar de los gatos de calle y fomentar una convivencia armónica entre todas las vecinas y vecinos de la ciudad.
El plan se empezará a ejecutar a principios de 2025 y consta de dos fases diferenciadas. La primera fase, que corresponden al primer año de implementación, permitirá definir todos los protocolos necesarios para la gestión de las colonias de gatos, incluyendo los procedimientos de capturas, alimentación y control poblacional. También se mantiene actualizado un mapa detallado de las ubicaciones de las colonias de gatos que hay que gestionar y, finalmente, se informará y se explicará el plan de gestión a la población y a las personas interesadas en colaborar en su ejecución, proporcionándoles formación y orientación.
De hecho, la formación es uno de los pilares de este nuevo plan de gestión. El Ayuntamiento ya llevó a cabo una primera sesión formativa en febrero pasado en la que asistieron 22 personas. En la formación se les dotó de conocimientos sobre buenas prácticas en la gestión de colonias, aspectos relacionados con la salud de los gatos y medidas para minimizar posibles inconvenientes en el vecindario. También, y antes de la implantación del plan, ya se ha avanzado en algunas de las acciones, como la inspección de las colonias de gatos y la coordinación con las personas alimentadoras, lo que ha permitido identificar y localizar las poblaciones urbanas de los felinos.
En la segunda fase, prevista para finales de 2025 o principios de 2026, consistirá en explorar las alternativas para reubicar las colonias en aquellos puntos donde su presencia genera conflictos, establecer refugios y áreas de comedor adaptadas a las nuevas colonias, asegurando un entorno óptimo para el bienestar de los animales y los vecinos y vecinas. Y finalmente, desarrollar un espacio dedicado a la recuperación y atención de los gatos, garantizando una mejor gestión sanitaria y de salud para los animales atendidos.
En Manresa, el proyecto para instaurar colonias controladas de estos felinos se inició en 2005, en puntos donde se había detectado un número importante de gatos. Desde entonces, el número de puntos donde hay presencia de gatos y personas alimentadoras ha aumentado notablemente. Así, actualmente, hay constancia de la existencia de un millar de gatos de calle, repartidos en 77 localizaciones, entre ellas siete colonias oficiales y controladas (La Balconada, el Cementerio, Los Condes, la zona de la Guingueta, La Guía, El Xup y Sant Pau) y 42 personas alimentadoras. Estas cifras de población de gatos hacen que sea necesario hacer un control, ya que se trata de una muy prolífica y en pocos años la cifra de ejemplares puede incrementarse exponencialmente. En estas 77 localizaciones, se ha aplicado el método Captura, Esterilización y Retorno a la Colonia a (CER). Este método se aplica desde 2005, y con respecto a los últimos años están las siguientes cifras: en 2022 se esterilizaron 370 gatos, 367 en 2023 y este año, hasta julio, se han hecho 225.
Más allá de estos controles, la proliferación de los gatos está muy vinculada a su alimentación. Cuando esta práctica, aunque se haga con la mejor de las intenciones, se produce de forma descontrolada, los felinos dejan de depender de su capacidad depredadora, lo que incrementa su proliferación y esto puede acabar comportando diferentes problemas. Entre ellos, problemas sanitarios para los mismos animales que forman parte de la colonia, ya sea por una falta de alimentación correcta o una climatología adversa. Además, hay un impacto ambiental en el entorno, en función de las dimensiones de la colonia, así como también un deterioro de las condiciones de salubridad del espacio, con malos olores, suciedad o deyecciones de los animales, presencia de plagas asociadas, riesgo para la salud en ubic aciones concretas, como por ejemplo zonas de tierra de espacios infantiles, y molestias por ruido y peleas entre los animales, especialmente en épocas de celo.
Por todos estos motivos, el objetivo general del Plan Municipal de Gestión Ética de Colonias de Gatos Comunitarios es el bienestar de estos animales en el municipio para facilitar la convivencia con la ciudadanía y la prevención de problemas de salud público y animal.