La consellera de Economía y Finanzas de la Generalitat, Alícia Romero, ha aprovechado su paso por la Cámara de Comercio de Tarragona para hablar del estado del Hard Rock. La socialista lo ha hecho en respuesta al alcalde de Salou, Pere Granados, que estaba presente en la charla que ha organizado la entidad.
Romero recalca que ahora mismo se encuentran a la espera de lo que digan los inversores, después de que el Parlamento aprobara tramitar el aumento del impuesto al juego. De esta manera, pasaría del 10% al 55%, la cifra que tenía antes de que el Gobierno de Artur Mas la rebajara. La consellera ha hecho referencia a sus alianzas con Comunes y Esquerra para justificar este incremento, aunque cree que la propuesta va en la línea del resto de tributos. Quien más tiene más paga. Por ello, ha pedido a los inversores “corresponsabilidad fiscal” y mantener la apuesta por el proyecto.
En este sentido, espera que no sea un freno al Hard Rock y no se tiren atrás. “Nos gustaría que las inversiones se mantengan, pero estamos en manos de su decisión”, avisa. Según la consellera, el Hard Rock ayudaría a desestacionalizar el turismo como ya lo hace el Port Aventura y “complementaria” el parque temático.