El rapero catalán Morad ha sido trasladado a un módulo residencial de la prisión de Brians 2, en Sant Esteve Sesrovires (Baix Llobregat), donde pasará las semanas próximas. En este módulo, el 7-8, donde hay reclusos con delitos de tráfico, como él, y otros en tercer grado o que disfrutan de permisos, según han explicado a la ACN fuentes penitenciarias.
Morad ingresó voluntariamente en prisión el lunes para cumplir seis meses de prisión por un delito contra la seguridad vial. Con el traslado a un módulo residencial podrá empezar a participar en los tratamientos para este tipo de delito. Ahora la junta de tratamiento tiene un máximo de dos meses para decidir si Morad es clasificado en segundo grado, el régimen ordinario, o directamente en tercer grado.
El rapero de L’Hospitalet de Llobregat y origen marroquí ha tenido varios episodios de enfrentamiento con policía y justicia por cuestiones relacionadas con la circulación. En alguna ocasión se le ha detenido por no responder a citaciones judiciales por delitos contra la seguridad del tráfico y en alguna otra por conducir sin carné. Cabe recordar que a finales de febrero el artista aceptaba una pena de dos años de prisión por los incidentes ocurridos durante la grabación de un videoclip en el año 2021 en L’Hospitalet de Llobregat.
En aquella ocasión el rapero se enfrentaba a siete años de prisión por incitación a desórdenes públicos y atentado agravado con instrumento peligroso. La fiscalía y el abogado de Morad llegaron a un acuerdo de conformidad previo y no se celebró el juicio.
Al rapero se le aplicó la atenuante muy cualificado de reparación del daño al haber consignado los 2.400 euros en concepto de responsabilidad civil que pedía el ministerio público. La cantidad correspondía a los daños que sufrieron seis vehículos de la Guardia Urbana, contra los que varios individuos lanzaron huevos y piedras.