Los Mossos han detenido en Barcelona a siete conductores de patinetes eléctricos que utilizaban los vehículos para cometer hechos delictivos y huir.
Fuentes policiales han informado a la ACN de que los arrestos se hicieron el jueves durante un dispositivo enfocado a detectar multirreincidentes que usan estos vehículos de movilidad personal (VMP) para actuar y escabullirse. La intervención se desarrolló entre las dos de la tarde y las once de la noche en los distritos del Eixample, Ciutat Vella, Sant Martí y Sants. También colaboró la Guardia Urbana.
Fruto de esta actuación se identificaron 134 personas que acumulan 687 antecedentes penales y se decomisaron doce vehículos de movilidad personal. Los Mossos interpusieron tres denuncias administrativas por posesión de estupefacientes.
Fuentes policiales han detallado que de los siete detenidos hay tres relacionados con robos de relojes con violencia e intimidación y que dos de estos arrestados son menores. Además, dos de los detenidos habrían cometido hurtos, uno estaría relacionado con un delito de estafa, y otro tenía un requerimiento judicial pendiente.
En cuanto a los patinetes intervenidos, los Mossos han señalado que siete de los aparatos se han decomisado porque sus propietarios no habían pagado una sanción administrativa pendiente; dos porque presentaban características técnicas que no se adecuan a la normativa; uno por apropiación indebida; uno porque la persona que lo conducía llevaba un casco no homologado, y otro porque el conductor dio positivo en un test de estupefacientes.
Esta actuación se enmarca en los dispositivos diseñados por los Mossos para combatir la multirreincidencia en Barcelona. Un ejemplo destacado es el dispositivo Lambreta que desde su puesta en marcha ha permitido intervenir más de 150 patinetes eléctricos a delincuentes reiterativos.