Este pasado domingo por la noche el estadio ‘Vicente del Bosque’, de Salamanca, vivió una de sus escenas más surrealistas. Fue durante un partido de la liga regional juvenil entre los equipos del Navega y el San Agustín de Valladolid, informa La Gaceta de Salamanca.
Y es que en el terreno de juego se coló un gato que, haciendo caso omiso del partido que se estaba disputando, se puso a hacer sus necesidades en medio del césped. Eso hizo que el árbitro tuviera que parar el partido -cuando se disputaba el minuto 77- para retirar la heces del felino y ‘expulsarlo’ del terreno de juego.
En el acta arbitral se recoge: “Durante el transcurso del partido, en el minuto 77, el madrileño tuvo que ser parado durante un minuto debido a que un gato montés entró en el terreno de juego y defecó. Habiendo, los integrantes del equipo local, de recoger sus heces antes de reanudar el partido”.
Parece que no es la primera vez que miembros de los dos clubes que comparten este campo, el Navega y el Salamanca FF, deben retirar los excrementos de una colonia de gatos que habitan en torno a las instalaciones y que aprovechan las horas nocturnas para ‘adobar’ el césped.